Víctor de Aldama ha pasado en tiempo récord de ser una persona con contactos en los ministerios a ser "ese personaje" o "un presunto delincuente". Pedro Sánchez ha negado cualquier tipo de relación con el comisionista de la trama y ha asegurado que sus declaraciones ante el juez "le merecen el crédito que tienen: ninguna " y que se trata de una "tremenda inventada".