La organización agraria Asaja Castilla-La Mancha ha fijado la movilización para el próximo 17 de diciembre en Toledo , fecha en la que los agricultores protestarán «ante la insostenible crisis de rentabilidad que atraviesa el campo». El objetivo «no sólo es reivindicar medidas más que justificadas para el sector, sino también que el consumidor aprenda a identificar los productos y conozca las diferencias entre lo que producen nuestros agricultores y lo que llega de fuera». Las principales causas de esta crisis son «la inflación e incremento de los costes de producción, el incumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria, las importaciones masivas a precios ruinosos y la falta de reciprocidad respecto a las producciones de países terceros». «Producir alimentos en nuestro país cuesta más de lo que reciben por ellos, a pesar de que la normativa vigente prohíbe que se pague por debajo de los costes de producción», asegura la organización agraria. Además, acuerdos comerciales como el de Mercosur «suponen que nuestros agricultores tengan que competir con productos importados que no cumplen con los mismos estándares de calidad, sostenibilidad y seguridad que se exigen a los nacionales». «Esto no sólo es injusto para los agricultores, sino que, además, afecta a los consumidores, que la mayoría de las veces no tienen opción de saber el origen ni las prácticas utilizadas en los alimentos que consumen», añade. También alertan de la posibilidad de que Donald Trump, otra vez presidente de Estados Unidos, «retome las medidas proteccionistas , como los aranceles a productos europeos, que en el pasado mandato afectaron gravemente a productos españoles». En resumen, «estamos poniendo en riesgo la soberanía alimentaria, es decir, la capacidad de decisión y control del consumidor de que lo que se lleva a la mesa está por encima de intereses económicos o políticos». «Lamentablemente, estamos ante una sociedad polarizada a instancias de la clase política y económica. No queremos falsos apoyos ni falsas promesas y rechazamos cualquier mensaje de odio o abuso del sufrimiento que padecen los agricultores», declara José María Fresneda, presidente de Asaja, asegurando que «la movilización sólo responde a un objetivo: defender el modelo productivo o, lo que es lo mismo, asegurar a la sociedad productos con garantías de seguridad alimentaria, bienestar animal y protección del medio ambiente». Entre las principales reivindicaciones del sector se encuentra la creación de un Observatorio de costes para aportar transparencia al mercado y facilitar la negociación con operadores comerciales. Solicitan, además, una Estrategia Nacional de Producción Agraria que limite la especulación en los precios de insumos, supervise los oligopolios y establezca medidas fiscales de apoyo al sector. También demandan una reforma del sistema de seguros agrarios , para que este proteja realmente las rentas de los agricultores ante adversidades climáticas y no excluya a quienes enfrentan dificultades económicas debido a las altas tarifas. En cuanto a las importaciones, exigen controles más estrictos sobre su trazabilidad, calidad y volumen , así como aranceles disuasorios y la aplicación de las «cláusulas espejo» en los acuerdos comerciales, de forma que los productos de terceros países cumplan con los mismos requisitos que los europeos. Por último, piden un etiquetado claro que informe a los consumidores sobre el origen y las condiciones de producción de los alimentos, garantizando transparencia y trazabilidad en el mercado.