Margarita ha vivido para poder decir al hombre que asesinó a su hijo hace 15 años lo mismo que le espetó a la salida de la Audiencia Provincial de Toledo: «¡Te veré en el infierno!» . Jesús Heredia Iglesias ha sido detenido esta mañana en Murcia capital, en el barrio del Carmen, por el Grupo de Localización de Fugitivos del Cuerpo Nacional de Policía y el Grupo de Operaciones Especiales (GOES). Se le buscaba desde hace once años por el asesinato de Jesús Robles Galera, sucedido en un bar de Talavera de la Reina en 2009. Escondido con su mujer en una vivienda de la que apenas salía, Jesús está más gordo que en la fotografía que la Policía Nacional tiene publicada en su sección 'Los más buscados', una exitosa campaña de difusión que está permitiendo al Grupo de Localización de Fugitivos unos resultados extraordinarios. Prado, hija de Margarita, ha conocido el arresto pasadas a las nueve de la mañana. «Tengo una noticia superbuena. Ha sido detenido», le ha sorprendido la abogada de la familia, María Ángeles Ten. «¡Ay, por Dios; ay, por Dios!», ha sido la reacción entre lágrimas de la hermana del difunto Jesús Robles. Para la letrada, supone una gran satisfacción: « Te quedaba la espinita de haber ganado un juicio y que el asesino estuviera fugado. Fue un caso que costó mucho trabajo para lograr que se repitiera el juicio. Parecía como que todo ese trabajo no hubiera validado para nada mientras Jesús Heredia siguiese libre». Ten ha sabido de la detención al recibir un mensaje de este periódico por WhatsApp. «Estoy muy feliz por la familia», ha afirmado la abogada, que reproduce las palabras de Prado al enterarse del arresto del asesino de su hermano: «Él, celebrando las Navidades, y nosotros hechos polvo» . El miércoles por la noche, la letrada recibió información de una mujer que situaba a Jesús Heredia Iglesias en Murcia, y trasladó inmediatamente los datos al 091, a la página de fugados de la Policía Nacional y al correo electrónico 'losmasbuscados@policia.es'. Para entonces, el Grupo de Localización de Fugitivos ya tenía controlada la vivienda, a la espera de una orden de entrada y registro, donde Jesús Heredia Iglesias ha sido engrilletado por fin sobre las siete de esta mañana. El 31 de enero de 2014, viernes, en la Audiencia Provincial de Toledo, un jurado popular lo declaró culpable del asesinato de Jesús Robles Galera. Pero Jesús Heredia no estaba preso, después de haber sido absuelto en un primer juicio que luego fue anulado, por lo que pudo marcharse a casa a la espera de conocer la sentencia. La resolución (15 años de cárcel por el crimen y otro más por la tenencia ilícita de un arma) fue leída y publicada cuatro días después, el 4 de febrero, martes, por el magistrado del tribunal del jurado, Manuel Gutiérrez, presidente de la Audiencia de Toledo entonces. Jesús Heredia, sin embargo, no apareció en la comparecencia para decretar la prisión, en la sala noble del vetusto edificio, porque sabía que iba a ir a la cárcel. De aquello hace más de diez años. Pero este jueves dormirá entre rejas.