Tras su paso por el G20, el canciller alemán, Olaf Scholz, no ha hecho ningún tipo de comparecencia pública aunque no han cesado los contactos que, entre bastidores, ha mantenido con el Partido Socialdemócrata (SPD). Una posición que en estos momentos debilita a la formación y que, aunque es conocida dentro de la dirección, no empuja al SPD a posicionarse de forma clara sobre quién será su candidato en las elecciones federales. «Tenemos un plan sobre cómo queremos disputar esta campaña electoral y ahora estamos dando los primeros pasos», aseguró el secretario general, Lars Klingbeil, en un intento de diluir la incertidumbre.
No obstante, no pasa un día sin que alguien del SPD comente la situación. Uno de los últimos fue Philipp Türmer, jefe de las Juventudes del partido (Jusos), que aseguró que no existe ninguna ley que diga que el actual canciller tenga que ser el candidato. Karl Lauterbach, ministro de Sanidad, se expresó de otra forma. «Para mí, Olaf Scholz como canciller es el candidato natural, lo que significa que tenemos un candidato y eso lo debemos confirmar cuanto antes». Quizás sea eso lo único en lo que están de acuerdo la gran mayoría de los socialdemócratas, que hay que tomar una decisión pronto.
Mientras, Scholz guarda silencio. Sus últimas palabras públicas al respecto las pronunció la semana pasada en Río de Janeiro durante el G20. «El SPD y yo queremos ganar y ya hemos demostrado que podemos hacerlo, incluso aunque las encuestas no nos acompañen», aseguró. Quienes esperaban más claridad del canciller se llevaron una decepción.
El debate ha llegado a la calle. Según un sondeo de Infratest Dimap, el 60% prefiere a Pistorius como candidato antes que a Scholz, que se queda en un 21%. En comparación con los otros partidos, el 42% piensa que el candidato de la Unión conservadora, Friedrich Merz, es un buen aspirante a canciller para su partido, el 34% da su visto bueno al verde Robert Habeck, y Alice Weidel, del partido ultra Alternativa para Alemania (AfD), recibe un 30%.
A tres meses de las elecciones, siguen creciendo las voces dentro del SPD que ven al actual ministro de Defensa, Boris Pistorius, como el candidato perfecto para enfrentar la carrera a la Cancillería. El lunes, tanto Wiebke Esdar como Dirk Wiese –líderes del SPD en el Estado de Renania del Norte-Westfalia, el más poblado del país–, no titubearon en mostrar su apoyo al ministro. Pero aunque el propio Pistorius se dejó querer –aseguró «no querer nunca descartar nada»– ayer por la noche difundió un vídeo en el que descartaba su candidatura y pedía cerrar filas en torno al canciller. No queda claro todavía si la renuncia de Pistorius terminará con las voces que piden que Scholz dé un paso atrás como Biden. En la socialdemocracia se temía que la discusión pudiera perjudicar al partido en un momento ya de por sí delicado con malas perspectivas en las encuestas. El ministro federal de Trabajo, el socialdemócrata Hubertus Heil, advirtió de una repetición del conflicto que, en 2021, se gestó dentro de la Unión conservadora con el cisma sobre la elección del candidato. «Mi partido es lo suficientemente inteligente como para aprender de los errores del señor Söder y del señor Laschet en la última campaña electoral», declaró Heil. En aquella época, el jefe de la socialcristiana CSU de Baviera, Markus Söder, y el entonces presidente de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Armin Laschet, protagonizaron un conflicto dentro del partido por presentarse a las elecciones, lo que acabó perjudicando a la Unión.
Sin embargo, es probable que el SPD tome pronto una decisión. Así lo anunció también el secretario general, Lars Klingbeil, en declaraciones al diario «Bild». «Ahora habrá una decisión rápida», afirmó. Sobre la cuestión del candidato, Klingbeil señaló que como líder del partido se había posicionado claramente a favor de Scholz.
Sin embargo, también reconoció que dentro del SPD hay opiniones diferentes. «Mi objetivo es crear unidad», subrayó y, para ello, primero deberá decidir el comité ejecutivo y, finalmente, el 11 de enero se hará el resto en el congreso que celebre la formación. No obstante, y según apunta la prensa alemana, el candidato a canciller debería ser presentado a más tardar el sábado 30 de noviembre.
Al contrario que Scholz, Pistorius es desde hace meses uno de los políticos más populares del país. Actualmente, seis de cada diez alemanes están satisfechos con su trabajo. Ningún otro político logra semejante aprobación entre los ciudadanos. El canciller le incorporó al Gabinete procedente de Baja Sajonia a principios de 2023, cuando necesitaba un sustituto para la dimitida ministra de Defensa, Christine Lambrecht. Con su «lenguaje sencillo» fue inmediatamente bien recibido por el Ejército.