Las inundaciones pueden causar daños devastadores en los vehículos. Restos de agua, barro y malos olores que parecen imposibles de eliminar son algunas de las principales consecuencias. Son muchos los malagueños que se han visto afectados por las inundaciones de la DANA de la semana pasada. Por esta razón, una empresa malagueña especializada en limpieza de coches demuestra que, con las técnicas adecuadas, es posible restaurarlos casi a su estado original. El primer paso tras una inundación es determinar el nivel de daño que sufre el coche . En este sentido, conviene comenzar el proceso inspeccionando cada rincón del vehículo, tal y como hacen los operarios de Málaga Car Detail . Esta evaluación es clave para decidir el tipo de limpieza y restauración que requiere el coche. Una de las técnicas que distingue a esta empresa malagueña es el desmontaje completo de los elementos interiores . De esta manera, se retiran asientos, alfombrillas e incluso paneles, lo que permite limpiar y secar cada pieza de forma individual. Este paso evita que la humedad atrapada genere moho o malos olores con el tiempo. El proceso de limpieza se realiza con herramientas especializadas que garantizan la eliminación de suciedad y residuos. Además, se utilizan métodos específicos para recuperar la textura y el color original de la tapicería. Una vez eliminados los restos de agua y barro, es importante proceder a un exhaustivo proceso de secado . Esto se realiza utilizando máquinas de aire caliente y deshumidificadores. De esta manera se evita que la humedad quede atrapada en rincones difíciles de alcanzar. Para garantizar un acabado perfecto, es necesario emplear ozonizadores . Estos equipos permiten eliminar los olores y purificar el aire dentro del coche. Cuando todos los elementos están limpios, secos y desinfectados, los operarios de Málaga Car Detail vuelven a montar cada pieza del coche para que todo quede en su lugar original. También revisan el sistema eléctrico y realizan pruebas de funcionamiento para detectar cualquier fallo. El resultado final es un vehículo impecable, libre de olores y con su interior restaurado. Nadie podría pensar que ese coche estuvo alguna vez afectado por una inundación.