La Asamblea de Madrid celebra este jueves un nuevo pleno ordinario, el último de noviembre, en el que se votarán las enmiendas a la totalidad de la oposición al proyecto de ley con el que el Ejecutivo autonómico quiere eliminar trámites para construir más rápido o atraer centros de datos y se debatirá sobre una propuesta del PSOE para que todos los hoteles de la región cuenten con camas elevables mecánica o electrónicamente antes de 2020 para mejorar la salud laboral de las camareras de piso o ‘kellys’.
Antes de llegar a estos puntos del día, la jornada ha comenzado con la sesión de control al Gobierno. Las preguntas de los portavoces de la oposición han estado marcadas por la gestión de las residencias de mayores de la comunidad, la desafección política y la financiación de las políticas de igualdad en los próximos Presupuestos; y ha servido para que Isabel Díaz Ayuso respalde sin ambages el veto del PP español al nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta y comisaria de la próxima Comisión Europea (CE), que este miércoles fue desbloqueado por un acuerdo de los ‘populares’ europeos, los socialistas y los liberales.
«Apoyo 100% que se vete a Ribera en Europa», ha asegurado Díaz Ayuso, «después de lo que ha sucedido en Valencia no veo bien premiar a ningún político», ha añadido en su turno de respuesta al líder socialista, Juan Lobato. «Hay que tener un ego y hay que estar realmente despegado para encima ir a ponerse medallas en ningún sitio», ha opinado Díaz Ayuso, para remarcar: «Apoyo 100% a Alberto Núñez Feijóo y apoyo 100% que Europa vete a esta mujer».
La jefa del Ejecutivo autonómico también se ha referido en este turno de palabra a la declaración del comisionista del caso Koldo, Víctor de Aldama, en la Audiencia Nacional. «Jueves, nuevo día de pánico en el PSOE», ha ironizado Díaz Ayuso, «Aldama canta voluntariamente a estas horas», ha añadido. «Espero que no se quede afónico», ha confiado, como a su juicio se quedó Begoña Gómez en la sesión de la comisión de investigación sobre la Universidad Complutense de la semana pasada.
En su pregunta, el líder de los socialistas, Juan Lobato, ha optado por hacer referencia al último CIS, y más en concreto al hecho de que los problemas políticos se han colocado como primer problema de los españoles. Para Lobato, «claramente» esto es «consecuencia del populismo y la polarización» y ha preguntado a Díaz Ayuso si con sus «insultos» y «ataques» se considera responsable de esta situación.
«En vez de apretar el botón de la polarización, debería apretar el botón de aumentar las plazas de la universidad pública«, le ha dirigido el líder socialista a la presidenta, a la que ha advertido de que «cuando se debilita la democracia, los que pierden son los ciudadanos». Antes de esta alusión, Lobato había tildado de «irresponsable» y «ridículo» el «intento» de Alberto Núñez Feijóo de evitar que Ribera sea vicepresidenta de la CE.
Manuela Bergerot, portavoz de Más Madrid, ha vuelto a reprochar a la presidenta autonómica su gestión de las residencias de mayores durante la pandemia. «Cada persona que forma parte de esas plataformas tiene más dignidad que todo su Gobierno», le ha dirigido, en referencia a las asociaciones que están denunciando en los tribunales y públicamente las muertes de sus familiares para que se investigue. La jefa de la oposición madrileña ha considerado que el modelo de atención en estos centros sigue sin ser óptimo.
«Es el modelo de la comida podrida», ha denunciado Bergerot, «las condiciones de las residencias son indignas para los mayores y para las trabajadoras», ha remarcado, y ha defendido la necesidad de cambiarlo por uno de residencias «pequeñas» con ratios más bajas. «Las residencias son un servicio más que no funciona porque han dejado de invertir en él», ha insistido la portavoz de Más Madrid, que además ha atribuido a Díaz Ayuso el tener «colapsada» la sanidad sanidad pública sin necesidad de que lleguen los asegurados de Muface. «Deje de tomarnos el pelo y haga algo», ha reclamado.
Díaz Ayuso ha calificado de «política de miseria» las referencias de la oposición a la gestión de las residencias en la pandemia y además ha vuelto a reprochar a la formación progresista cómo ha manejado el ‘caso Errejón’ preguntándole si «ha habido algún problema de acoso o algo que desconozcamos esta semana entre sus filas». «No sé qué ha pasado con la diputada black«, ‘ha señalado la presidenta en referencia a Loreto Arenillas, la diputada acusada por su partido de encubrir al exportavoz de Sumar en el Congreso que está de baja médica desde la semana pasada. «Algo ha pasado con la diputada black que está cobrando por no venir a trabajar», ha insistido en lanzarle a la portavoz de Más Madrid.
Mientras, la portavoz de Vox, Rocío Pérez Moñino-Aranda, ha acusado a Díaz Ayuso de movilizar 40 millones de las próximas Cuentas autonómicas para financiar «políticas de género». «Han convertido e institucionalizado las locuras de los de Errejón», se ha quejado la portavoz del partido de Santiago Abascal, que ha vuelto a reclamar al PP que derogue «las leyes ideológicas de género». «Es una estafa hablar como Vox para luego legislar como el PSOE», le ha lanzado Moñino a la presidenta.
La jefa del Ejecutivo ha reclamado a la portavoz de Vox que «concrete» las partidas de los Presupuestos que según ellos «se dedican a perpetuar las políticas progres». En la réplica, Díaz Ayuso ha considerado que su pregunta había quedado sin contestar y ha afeado a Vox no «estudiarse» ni «trabajarse» el Presupuesto. «Cuando se les hace una pregunta concreta son incapaces de responder porque van a la contra de todo (…) solo viven del no, de ir a la contra», ha insistido. No hacen otra cosa que ir contra el PP», ha aseverado la presidenta, «viven para ayudar a Pedro Sánchez».
