Cada vez es más habitual que las piaras de jabalíes visiten varias urbanizaciones de Huércal de Almería , junto a la capital almeriense. En esta localidad, los vecinos se encuentran casi a diario con los cerdos salvajes que campan a sus anchas en busca de comida, casi siempre en los contenedores de basura. Hace unos años apenas eran unos ejemplares los que se veían. Con el paso del tiempo los animales se han reproducido y cada vez son más numerosos. La situación se debe a la cercanía de las ramblas aledañas del río Andarax. No lleva agua nunca, pero en su curso se ha generado una cobertura vegetal que ofrece un refugio idóneo a los jabalíes. Cuando cae la noche comienzan a desfilar las familias de jabalíes llegando a formar auténticas piaras. Los vídeos de los paquidermos cruzando por urbanizaciones, incluso por la misma Nacional 340 que une la localidad con la capital siguen publicándose en redes sociales. «A 20 metros de donde estoy yo cuatro jabalíes, no me lo puedo creer. La familia de jabalíes comiendo de la basura », se escucha decir en el vídeo que ha publicado en Tiktok el usuario @bertoluccigus. El Ayuntamiento de Huércal de Almería se encuentra realizando durante los últimos meses un seguimiento y captura de la población de jabalíes con el fin de dar solución a la problemática ocasionada por la presencia de estos animales en el municipio. La aparición de estos mamíferos en zonas urbanas y periurbanas ha provocado que estos aprovechen fuentes de alimento de origen humano a la vez que encuentran zonas de vegetación cerrada donde refugiarse. El incremento de la población de jabalíes, además de problemas de tráfico e inseguridad, facilita la transmisión de enfermedades . Tuberculosis, rabia, triquinosis o brucelosis son algunas de las patologías que pueden llegar a los humanos. Para minimizar el riesgo para las personas recomiendan no dar de comer a los cerdos salvajes, con este comportamiento se modifica su conducta y acaban perdiendo el miedo a las personas.