Con el cierre del año a la vuelta de la esquina, el plazo para realizar aportaciones a planes de pensiones en España —con un máximo de 1.500 euros anuales— también está a punto de expirar. Estas aportaciones, no solo son clave para ahorrar de cara a la jubilación, sino que además ofrecen ventajas fiscales al reducir la base imponible del IRPF.