Llueve sobre mojado. El Córdoba CF ha trasladado esta semana una queja formal ante el Comité Técnico de Árbitros (CAT) por la actuación del colegiado del VAR, José Antonio López Toca, en el partido del pasado domingo frente el Cádiz en el Nuevo Mirandilla. Ha sido la gota que ha colmado el vaso. En la entidad blanquiverde también se sienten perjudicados por el trato que están dispensando los árbitros en general al equipo cordobesista en su regreso al fútbol profesional cinco años después. La afición está irritada con los colegiados por sus polémicas decisiones con el equipo cordobesista. El Córdoba , además de las quejas por el VAR, también lamenta que sea, curiosamente, el equipo que acumula más penaltis en contra de la categoría, seis en total, e igualmente el que más expulsiones ha sufrido en el primer cuarto del campeonato, cuatro (sin contar la roja a Ania en el banquillo, que sería la quinta). Sólo le iguala el Eldense en materia de rojas. Hay otro factor más llamativo. El Córdoba todavía no ha estrenado el VAR en su estadio . Dicho de otro modo: el VAR todavía no ha debutado en El Arcángel, a pesar de que ha jugado ya siete partidos como local . Ningún árbitro ha acudido aún al monitor arbitral a pie de campo del coliseo cordobesista a revisar una decisión arbitral. Y han tenido algunas oportunidades para hacerlo, especialmente las que hubieran sido a favor. Baste citar como ejemplos gráficos la mano en el área de un jugador del Málaga en un partido que finalizó 0-0. O las dos acciones que acabaron con Adilson, frente al Burgos, y Albarrán, contra al Deportivo, con la nariz rota por golpes de un contrario. Los dos estuvieron varias semanas de baja por este motivo. Por menos, levantar el pie en el área contrario, Theo Zidane fue expulsado con roja directa ante el Granada con una hora de partido por delante. Los rivales que rompieron la nariz a los jugadores blanquiverdes no fueron ni amonestados . El VAR en El Arcángel sigue sin estrenarse, como en los cinco anteriores que el equipo pasó por Segunda B, Segunda RFEF y Primera Federación sin esta tecnología en uso en estas categorías. El caso de los penaltis en contra empieza a ser sangrante para el vestuario del Córdoba. Le han señalado seis penas máximas en contra en sólo 14 partidos. Al que más de Segunda. Algunas muy rigurosas que ya las querría el equipo cordobesista que tuvieran el mismo umbral a favor. La más polémicas quizás han sido la última en Cádiz , donde incluso si hubiera habido contacto, como interpretó el VAR y el árbitro, quizás habría que haber valorado si era suficiente para derribar al delantero. Más inexplicable parecen los penaltis señalados a Mati en Elche (el segundo de ese encuentro) o Marvel en Albacete . Por el contrario, al Córdoba sólo le han señalado dos penas máximas a favor. El VAR, por ejemplo, interpretó que la mano de un jugador del Málaga en el área pequeña no interfirió en la jugada, fue una posición natural. Al revés le pasó otra vez a Marvel ante el Castellón en el 0-1 de Suero. Curiosamente, el portero del Córdoba ha parado cuatro de estos seis penaltis. Una cifra que va camino de un récord. Sin embargo, tres de esos cuatro despejes acabaron, finalmente, en gol en contra al llegar el rechace a las botas del lanzador del penal. Y no para ahí la lista del choque frontal del Córdoba con los árbitros , que ha tenido la gota que ha colmado el vaso con la actuación del VAR en Cádiz. El equipo blanquiverde también es el conjunto que ha recibido más expulsiones de la categoría. Sólo le empata el Eldense. Cuatro jugadores se han marchado por roja directa del terreno de juego dejando en inferioridad al equipo antes de tiempo. Una losa muy pesada en el fútbol actual. Han sido Lapeña ante el Burgos, Martínez frente al Elche, Theo Zidane contra el Granada y el último Jacobo en Santander. Poco que objetar a las rojas directas que vieron Lapeña y Martínez siendo los últimos defensores ante los rivales. Sin embargo, la rigurosa roja a Theo en Los Cármenes (que ni vio al rival que llegaba por detrás) contrasta con la narices rotas de Adilson y Albarrán sin amarilla al contrario. Los árbitros están acostumbrados a escuchar de todo de los jugadores y a hacer oídos sordos en el césped, pero el colegiado tuvo el oído fino para interpretar como insulto (quizás desconsideración) que Jacobo le dijese '¡Qué malo eres!' cuando iba a ser sustituido en el Sardinero . Fue roja. A las cuatro de los jugadores se le suma la quinta al entrenador. Iván Ania vio la roja en Cádiz tras protestar después ver las tres polémicas decisiones del VAR en contra y observar que no llamaban al árbitro para revisar un posible empujón a Adilson en el área. Ha sido sancionado con dos partidos de castigo, que cumplirá ante el Zaragoza este sábado y en Almería el martes .
