Ricardo Uvalle Aguilar, constitucionalista y profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM, advirtió sobre el impacto de las reformas que eliminan órganos autónomos y las consecuencias sobre las implicaciones para la democracia mexicana.“Si nosotros nos ponemos a revisar la historia de cómo se crearon estos órganos, la mayoría nace de las secretarías de Estado, luego se vuelven desconcentrados, descentralizados y autónomos. Es un proceso que costó 34 años. Con esta reforma, de un plumazo, regresamos al centralismo”, explicó en entrevista para MILENIO Televisión con Elisa Alanís.Detalló que el dictamen plantea la eliminación de siete órganos autónomos, aunque aclaró que los energéticos no tienen esta naturaleza.“Son órganos que tienen una naturaleza de reguladores coordinados y ya traían una dependencia exclusiva del Poder Ejecutivo, del Presidente. Los que sí desaparecen son estos cuatro: el INAI, IFT, Cofece y Coneval”.Uvalle destacó el riesgo de la centralización del poder en el ejercicio del gobierno y dijo que no existe ningún mecanismo para poder controlarlo: “los órganos autónomos, con sus falencias, porque son órganos perfectibles”. Alertó sobre el impacto en la democracia, y dijo que las consecuencias van más allá del discurso técnico y afectan directamente a la ciudadanía.“Todos tarde o temprano vamos a necesitar de alguna u otra manera que existieran estos órganos para poder garantizar derechos. Y si no hay instituciones que puedan garantizar estos derechos con la autonomía y la naturaleza constitucional que tenían, pues ahora de verdad estamos a merced del voluntarismo político”, concluyó.