Pese a la fuerte caída del consumo, La Unión, una cadena de panaderías sin TACC que es parte del Grupo Abridor, vio en el modelo de franquicias low cost una estrategia para desarrollar su plan de expansión local e internacional.
Con 13 locales en Buenos Aires y siete aperturas planificadas para lo que resta del año, la marca tiene como objetivo sumar 50 locales en los próximos dos años alrededor de Buenos Aires -por una cuestión de logística, ya que su centro de producción está en Caballito-. En una segunda etapa de su plan estratégico, buscan implementar un modelo de productos congelados para llegar a diferentes puntos del país.
"Todavía tenemos tanta capilaridad por lograr en Buenos Aires que tenemos el foco puesto ahí", explica Pedro Díaz Flores, socio y director de Grupo Abridor, la firma gastronómica que cuenta con 20 marcas como Águila Pabellón, Ruiz y, recientemente, Los Inmortales.
Hoy una franquicia de La Unión cuesta alrededor de u$s 40.000 y el retorno de la inversión para el franquiciado se sitúa alrededor de los 18 meses. El Grupo no cobra un royalty o un fee mensual a los franquiciados, sino que su negocio se basa en la venta de su producción: "El sistema de franquicias es muy atractivo. Nosotros producimos el 100% de lo que se vende en los locales de La Unión, por ende tenemos controladas la calidad y la entrega", sostiene.
"Captamos un público que quiere poner franquicias y que está dispuesta a invertir esa cantidad de dinero, en comparación con franquicias que cuestan entre 300.000 y 400.000 dólares. Representa un buen símbolo de status, porque ofrecés un espacio agradable y un producto premium", agrega.
Debido a la compleja situación macroeconómica y a la caída en el consumo, Abridor tuvo que acelerar sus planes de internacionalización. "Veníamos pensando la estrategia del Grupo en una economía donde afloraba el turismo porque el tipo de cambio era otra, el escenario era estacionario y la gente se deshacía de los pesos y se volcaba a la experiencia. Eso nos traccionaba mucha demanda como a todo el sector gastronómico y hotelero, pero cambió drásticamente para pasar a un modelo donde nos volvimos caros en dólares. Así que recalculamos y aceleramos la internacionalización", destaca sobre los planes de la marca que incluyen desarrollar La Unión fuera de Argentina bajo el mismo modelo.
"Tenemos el plan para desembarcar en España el año que viene, puntualmente en Madrid y Barcelona. También proyectamos abrir La Unión en Uruguay el año que viene y queremos tener una alianza estratégica con un partner chileno para llevarlo al país vecino", adelanta.
Además de su ambiciosa propuesta, Grupo Abridor trabaja con varios proyectos en desarrollo. Recientemente anunciaron una alianza con la emblemática pizzería Los Inmortales para encarar un nuevo modelo de negocio: contempla la apertura de franquicias de la marca que ya tiene 70 años de trayectoria en Argentina.
"Con Los Inmortales tenemos un plan escalable muy importante para los próximos dos años. En el primer trimestre del año que viene vamos a estar abriendo el primer local relanzamiento de la marca en Quartier Dorrego (Palermo). También estamos trabajando en un proyectos muy grande en Costanera y en diciembre vamos a lanzar la primera hamburguesería del Grupo, Fluo", dice.
La firma fue, además, la responsable de volver a poner en valor la confitería El Águila, en el Ecoparque de la Ciudad de Buenos Aires -ex Jardín Zoológico-. Hoy abierta como un restaurante de 300 cubiertos, la casona de 1905 que es Monumento Histórico, llegó a tener 4500 personas en lista de espera para probar los platos del chef Julián Gallende.
La Unión es una panadería que basa toda su producción en alimentos sin TACC, lo que los distingue dentro del mercado y del segmento de los panificados. "Es muy difícil lograr un muy buen producto gluten free, sin TACC, y eso es una barrera de entrada importante para la competencia. No somos muchos los que estamos en ese segmento, nosotros lo lideramos: La Unión es la que más sucursales tiene y tenemos una gran escalabilidad para seguir abriendo puntos de venta", detalla el empresario.
La cadena tiene 60 variedades de productos que van desde distintos tipos de panes, línea de laminados y de tortas, cookies, hasta sándwiches de miga, un nuevo producto que acaban de presentar. "Es un producto que en el universo sin TACC no existía. Estamos innovando. Es un desarrollo que nos llevó muchos meses porque es muy complejo de lograr un pan de miga sin TACC".
También están lanzando -primero en el local de Arévalo y luego buscarán replicarlo en el resto de las sucursales- productos de almacén como yerbas, mermeladas, pastas sin TACC, entre otros, que acompañan la propuesta de la marca.