Víctor Gonzalo de Aldama utilizó señalamientos de la agenda oficial e internacional del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como oportunidades en las que intentar sacar tajada en beneficio de la trama, en la que ejercía de líder, y que tenía como principal fuente de enriquecimiento el cobro de comisiones ilegales en adjudicaciones públicas, sobre todo para el suministro de mascarillas a distintas administraciones.
El empresario, que hizo del papel de «conseguidor» su principal medio para vivir, intentó gestionar precisamente con el asesor más cercano a Ábalos cuando este era titular del Ministerio de Transportes, Koldo García, que el entonces ministro, ahora imputado en el «caso Koldo» en el Tribunal Supremo tras hallar indicios de criminalidad en su actuación, se reuniese con el presidente de República Dominicana, Luis Rodolfo Abinader. Aprovechando su primera visita oficial en el extranjero, que tuvo como destino nuestro país e incluyó, evidentemente, su prescriptiva reunión con Sánchez.
Hace más de dos años, el 17 de abril de 2021, pasadas las 23:00 horas, Aldama le escribió un mensaje por WhatsApp a Koldo para consultarle si es consciente de que «el presidente de RD (República Dominicana) vuela esta noche a España». Le ofrece, seguidamente, más detalles, «verá al 1», y le hace una propuesta: «Sería bueno que el jefe le viera también».
El «1» es Pedro Sánchez. «En sus conversaciones (Aldama y su círculo más próximo) cuando hacen referencia al presidente del Gobierno lo hacen siempre nombrándolo como el ‘‘1’’», ratificó el juez Ismael Moreno, que investiga a la trama en la Audiencia Nacional, en base a los informes de la Unidad Central Operativa (UCO).
También lo confirma que dos días después a esta conversación, el 19 de abril de 2021, Sánchez recibió en Moncloa a Abinader, con motivo de la XXVII Cumbre Iberoamericana celebrada dos días más tarde. El apodo de «el jefe», por otro lado, como se extrae de las comunicaciones intervenidas policialmente, es el que le colocaron al propio Ábalos.
Esta fue la forma en la que el expresidente del Zamora Club de Fútbol mostró su interés al asesor en que el ministro de Transportes mantuviese, «si puede ser», con el mandatario dominicano un encuentro, se deduce que por el interés en abordar algún negocio atractivo para el entramado con este Gobierno o con alguna empresa o empresario de este país de Latinoamérica.
[[QUOTE:PULL|||Aprovechó la reunión del mandatario con Sánchez en Moncloa para intentar un encuentro de interés]]
Aldama tiene clara, como evidencia la conversación, cuál es la oportunidad para que Abinader se vea con Ábalos. El encuentro que mantuvo el presidente de República Dominicana el día 18 con el secretario general del organismo de Turismo de la ONU en Madrid. «Va a ver a Zurab (Pololikashvili) en privado, podría ser en esa reunión».
El empresario queda a la espera de la opinión de Koldo sobre esta posibilidad y, al mismo tiempo, se ofrece a ser él quién realice las gestiones para lograr llevar a término esta reunión. «Tú me dices y lo organizo», dejó escrito. Pololikashvili fue el embajador extraordinario de Georgia en España de 2006 a 2009 y, posteriormente, ejerció de ministro de Desarrollo Económico en este país. Mientras que Aldama fue nombrado cónsul honorario de Georgia en España en junio de 2021 y mantuvo el cargo hasta el pasado mes de marzo.
Otro ejemplo de cómo intentó aprovecharse de la agenda internacional del presidente del Gobierno lo encontramos con anterioridad, cuando el también líder del PSOE llevaba menos de dos años al frente del Consejo de Ministros.
La UCO reveló en uno de sus informes que encontró en uno de los ordenadores de Aldama una carta creada por él mismo el 10 de diciembre de 2019, en la que invitaba a la vicepresidenta de la República Bolivariana de Venezuela, Delcy Eloina Rodríguez, a visitar oficialmente España «para conversar sobre las posibilidades de que nuestro dos países tendrán una vez embestido (sic.) el presidente Sánchez». Este documento, sin embargo, aparece firmado «atentamente» por Ábalos en su condición de «secretario de organización» de Ferraz.
Los agentes concluyeron en base a las pesquisas que Aldama «habría revestido la llegada de Delcy a España como un viaje de interés para este Ministerio (de Transportes), si bien Aldama guardaría intereses particulares en dicha visita».
La invitación en cuestión fue enviada por el empresario a Koldo, horas después de su elaboración. Esta Unidad de la Benemérita se muestra segura en el informe de que «esta carta muestra cómo Aldama se habría valido de las más altas instancias del Ministerio de Transportes para organizar este viaje».
Todo ello, lo hizo paralelamente a su otra principal ocupación, la de consejero de Globalia (2019-2021), la compañía propietaria de Air Europa, la línea aérea de la familia Hidalgo para la que intervino en el Gobierno, utilizando su influencia en Transportes como «nexo corruptor», en pro de la concesión del rescate 475 millones que evitó su quiebra por las restricciones de la Covid.