Un mapa elaborado por la Asamblea de Barrios por el Decrecimiento Turístico apunta a que en un 20% de los casos que se saltan la normativa se usa un permiso que fue registrado para otro piso
“Si preguntan, decid que sois amigos del propietario”: así opera la mayor trama de pisos turísticos ilegales de Barcelona
En Barcelona hay 15.221 alojamientos turísticos anunciados en Airbnb. Más de la mitad (51,6%) no tienen una licencia válida. Esta cifra suma la oferta de hoteles, viviendas y alquiler de habitaciones para uso turístico. Los datos surgen de un mapa elaborado por la Asamblea de Barrios por el Decrecimiento Turístico (ABDT), que ha cruzado los anuncios en esta plataforma y las licencias expedidas por el Ayuntamiento.
En más de la mitad de casos que se saltan la normativa, se trata de un propietario que tiene más de un alojamiento turístico y, si bien tiene licencia para alguno de ellos, otros no han sido registrados. Además, también destaca que en el 19,3% de los casos se usa una licencia repetida. Es decir, que está registrado con el permiso otorgado a otro alojamiento. Y en hasta el 13%, el propietario no ha realizado ningún trámite para regularizarlo.
Estos cálculos afectan tanto a hoteles como a pisos y habitaciones turísticas anunciadas en la plataforma, pero los creadores del mapa calculan que la gran mayoría de fraudes corresponden a las viviendas, siendo que en más del 40% de los casos carecen de licencia.
“Es desastroso”, asegura Daniel Pardo, portavoz de la ABDT, que apunta como responsable a la administración competente de otorgar las licencias y vigilar que la oferta anunciada en la ciudad cumple la legalidad.
Por su parte, el Ayuntamiento de Barcelona anunció que en el transcurso del mandato de Jaume Collboni cerraría todos los pisos turísticos de la ciudad. El consistorio los cifra en unos 10.000, pero según los cálculos de la ABDT, habría 12.600. A los que habría que sumar el alquiler de 7.600 habitaciones.
El Ayuntamiento, preguntado por este baile de cifras, asegura que está elaborando un informe propio para explicar que el mapa dibujado por esta entidad sea distinto al diagnóstico del consistorio. El ejecutivo de Collboni, además, ha hecho de los pisos turístico una bandera de su mandato y está en plena campaña de inspección de la oferta ilegal en la ciudad. Según sus cálculos, habría 6.000 operando sin licencia, una cifra algo menor a la que baraja la ABDT.
Desde Airbnb niegan que la situación sea esa y aseguran que los datos son “inexactos” y añaden que las diversas modalidades de alojamientos turísticos tienen sus propias normas y regulaciones “No todas necesitan mostrar una licencia de Vivienda de Uso Turístico (VUT) porque están sujetas a otro tipo de regulaciones”, aseguran desde la plataforma. Igualmente, aseguran que los datos que se muestran en la plataforma no siempre son “fiables” porque no todos los anuncios que se muestran están necesariamente activos.
Una de las novedades del mapa elaborado por la entidad es que localiza la oferta turística en la ciudad, para poner estos datos en conocimiento de la ciudadanía. “Las viviendas desprovistas de su uso social y destinadas a la especulación turística eran viviendas en las que vivían vecinos y vecinas ahora expulsadas”, aseguran.
Apuntan que es tarde para retornar estos pisos a sus antiguos propietarios, pero insisten en que reducir la oferta y devolver estos inmuebles al parque de alojamiento turístico podría ser una herramienta para solventar la emergencia habitacional.
La entidad exige el cierre efectivo de todas viviendas turísticas e, igualmente reclama que los hoteles a los cuales la licencia les caduca próximamente sean devueltos al parque de vivienda. “La reducción de la oferta turística debe venir acompañada de políticas que garanticen que no aumentarán la carrera especulativa sino para aumentar el parque de vivienda asequible”, apuntan.