El reciente Protocolo de Optimización del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Perú y China constituye un avance importante en las relaciones comerciales entre ambos países, con un enfoque destacado en el comercio electrónico.
Este capítulo se presenta como una herramienta clave que permite a las empresas peruanas, especialmente a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), ampliar sus mercados sin los elevados costos asociados con la necesidad de establecer presencia física en el extranjero.
El objetivo principal de esta nueva sección es facilitar la internacionalización de las mipymes peruanas, brindándoles acceso al vasto mercado chino sin la obligación de abrir filiales en dicho país.
La ministra de Comercio Exterior y Turismo, Desilú León, destacó que este desarrollo representa un paso esencial en la modernización del TLC, adaptándolo a las nuevas realidades del comercio global y fomentando la competitividad de los emprendedores peruanos en un entorno digital de rápida expansión.
El protocolo incluye exoneraciones tributarias para los intercambios digitales, lo que genera un entorno favorable para que las empresas puedan exportar directamente desde Perú sin enfrentarse a barreras administrativas complejas.
Además, este cambio se complementa con un capítulo sobre sostenibilidad, que fomenta la adopción de prácticas responsables con el medio ambiente, lo que no solo mejora la competitividad de Perú en el comercio global, sino que también refuerza su imagen como un socio comprometido con el desarrollo sostenible.
Una de las principales ventajas de este nuevo capítulo de comercio electrónico es que elimina la obligación de que las mipymes peruanas abran filiales en China para poder operar en línea.
Esta medida representa una oportunidad decisiva para las pequeñas y medianas empresas, ya que les permite acceder directamente al mercado chino sin los elevados costos y trámites administrativos que implicaría establecer una sucursal. El comercio electrónico facilita el proceso de internacionalización, brindando a productos peruanos emblemáticos, como arándanos, uvas frescas y cacao orgánico, la posibilidad de llegar con mayor facilidad a los consumidores chinos.
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Adicionalmente, el acuerdo contempla la exoneración de tributos sobre los intercambios digitales, lo que reduce considerablemente las barreras económicas para las mipymes. De este modo, las pequeñas y medianas empresas pueden competir en condiciones de igualdad con las grandes corporaciones, posicionándose de manera efectiva en un mercado global donde el comercio electrónico es el principal motor de crecimiento.
La ministra León señaló que esta disposición beneficiará especialmente a sectores clave de la economía peruana, como la agroindustria, facilitando la comercialización de productos con gran demanda en mercados internacionales.
El capítulo relativo a la sostenibilidad también juega un rol crucial en el TLC optimizado. Esta disposición exige que los productos peruanos que se exporten a China y otros mercados internacionales cumplan con estándares y certificaciones ambientales específicas.
La sostenibilidad se ha convertido en un criterio esencial en el comercio global, y este acuerdo garantiza que los productos peruanos no solo sean competitivos en términos de calidad, sino también responsables con el medio ambiente. Esta exigencia responde a la creciente demanda de los consumidores globales por productos que respeten el entorno y utilicen los recursos naturales de manera responsable.
