La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica considera que las celebraciones que en el aniversario de la muerte del dictador acogerán varias iglesias españolas "ofenden y humillan a las víctimas" de la dictadura
El auditorio de la República que Franco convirtió en iglesia y acabó en manos del Opus Dei tras un acuerdo con el CSIC
Un año más Francisco Franco será recordado en iglesias de toda España en el aniversario de su muerte. Con ocasión de este 20N, cuando hace casi medio siglo que el dictador falleciera, se celebrarán casi una veintena de misas en diferentes ciudades “en sufragio por el alma de Francisco Franco”, según anuncia la fundación que lleva su nombre. Ante ello, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha registrado una petición oficial pidiendo al Gobierno que sancione “el amparo y la participación” de la Iglesia Católica “en actos que enaltecen al dictador”.
A las 16 misas organizadas directamente por la Fundación Francisco Franco, para cuya extinción ya ha iniciado los trámites el Ministerio de Cultura en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática, se suman otras anunciadas por grupos franquistas como el Movimiento Católico Español (MCE). Según su recopilación, el Valle de Cuelgamuros ofrecerá una misa en la mañana de este miércoles y posteriormente se ha convocado una visita al cementerio de Mingorrubio, donde está la tumba del dictador convertida en un auténtico altar franquista.
Las misas tendrán lugar en iglesias de multitud de ciudades, entre ellas Valladolid, Málaga, Santander, Huesca o Zamora. En León, que no aparece en el listado de la fundación, también habrá ceremonia: la oficiará el polémico cura Jesús Calvo, que en 2017 llegó a decir que la represión franquista “tendría que haber sido mayor” o que “la vida de cualquier torero vale más que la de todos los rojos”. En Madrid, la misa será en la parroquia de los Doce Apóstoles, la habitual en los últimos años y de la que los asistentes suelen salir entonando el 'Cara al sol' y con los brazos en alto.
A punto de cumplirse el medio siglo de su fallecimiento, son muchos, muchísimos los españoles que siguen guardando su memoria, que piadosamente ofrecen sus oraciones en sufragio por el alma de un devoto hijo de la iglesia. Una Iglesia Católica por la que él luchó como nadie y por la que levantó bandera cuando estaba en el ojo del huracán de una horda iconoclasta, incendiaria que a nada ni a nadie obedecía“, justifica la Fundación Francisco Franco, que también recuerda a José Antonio Primo de Rivera, asesinado en la Guerra Civil también un 20N.
“Si una iglesia celebrase una misa en honor de un terrorista la justicia actuaría de oficio, para proteger a sus víctimas e impedir la celebración de un acto de enaltecimiento de alguien que causó un daño irreparable”, lamenta la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica en su escrito. Considera su presidente, Emilio Silva, que el Estado “no puede permanecer pasivo” cuando celebraciones de este tipo “ofenden y humillan a las víctimas de la dictadura franquista” porque supone “la desprotección de las familias de las vímctimas que han sufrido el peor delito: la desaparición forzada”.
Por eso la ARMH reclama sanciones y que estas “no sean solo simbólicas” sino que vayan “desde las multas económicas a la retirada de la casilla que privilegia a la Iglesia Católica en la declaración de la renta”, ejemplifica.
“A un Estado democrático deben dolerle todos los dolores de víctimas de crímenes graves y violentos y no puede ser que para unos casos se tomen todo tipo de medidas judiciales y protectoras y para otros se consienta el daño y se mantengan relaciones favorables con la institución religiosa que ampara el enaltecimiento del dictador”, concluye la petición.