El tenista español Rafa Nadal puso anoche fin a su extensa y exitosa carrera deportiva, con la etiqueta de ser uno de los mejores de la historia de este deporte, donde lo ganó casi todo, sobre todo un total de 22 'Grand Slams', 14 de ellos en Roland Garros. El balear, de 38 años, no pudo cumplir el sueño de retirarse con una sonrisa y lo hizo con la tristeza que acompañó a la eliminación de España en la 'Final a 8' de la Copa Davis que acoge Málaga hasta el próximo domingo. Sin embargo, aseguró que se retira del tenis "con la tranquilidad" de haber dejado "un legado no solo deportivo, sino también personal. Y así es. Su señorío y grandeza ha sido reconocido en casa uno de los rincones del mundo a los que llegó con su raqueta.
Rafa Nadal puede ganar o puede perder pero ante todo es un caballero dentro y fuera de la pista. Y ayer volvió a demostrarlo cayendo con pundonor y mostrando su amor a España y a su equipo en la rueda de prensa de posterior.
Pocos deportistas han sido tan alabados en el mundo por su ejemplar comportamiento y son muchos los que se han echo eco de ello a los largo de su carrera como ocurrió cuando se vio obligado a dejar Wimbledon en 2022 por una lesión abdominal.
El manacorí intentó entrenar por la mañana, al día siguiente de su partido contra Fritz. Probó el saque, una preparación suave, en Aorangi Park, complejo que está pegado a las instalaciones del All England Club, un poco alejado de miradas. Horas después, convocó a los medios por la tarde. Se temía lo peor, y se confirmó. Su lesión abdominal le va a impedir disputar las semifinales de Wimbledon contra Kyrgios. El tenista abandonaba triste el torneo pero no sin antes dejar su sello personal.
Antes de marcharse, Nadal pasó a saludar a los empleados del complejo All England tras su retirada del torneo de Wimbledon y mostró su grandeza una vez más. Rafa Nadal tuvo un bonito gesto que dio la vuelta al mundo. Pasó por el predio de Wimbledon y estrechó la mano uno a uno a los empleados que trabajan en el torneo del Grand Slam. Prácticamente por orden, Nadal fue dando la mano y abrazando a los trabajadores y trabajadoras y tuvo también tiempo para hacerse unas fotos con los aficionados.
Este gesto no paso desapercibido y llamó la atención de un empleado de Roland Garros que ha quiso dejar constancia en redes sociales del lado más humando del tenista. Sobre sus imágenes despidiéndose uno por uno de los empleados que trabajan en el All England Tennis Club se pronunció Arthur Delaye, trabajador de Roland Garros desde hace años, que colmó de elogios al tenista español.
Un emotivo mensaje
“Como trabajador en Roland Garros desde 2018, puedo decir que Rafa siempre es muy amable con el personal y se toma el tiempo de saludar a cada persona al final del torneo. Amo a RAFA NADAL porque es un gran luchador y en la cancha y la definición de humildad fuera de la cancha”, escribió este joven sobre Nadal, ganador en 14 ocasiones del torneo francés
Su mensaje corrió como la pólvora en redes sociales y cuenta con cientos de retuits y miles de “Me gusta”. Ayer, París y Roland Garros tampoco se olvidaron de él homenajeando como propia a un leyenda eterna.
