Sin acuerdo con Javier Milei, los gobernadores dialoguistas presionan por conseguir un dictamen del Presupuesto 2025 y amenazan con un dictamen propio de no conseguir acuerdo en los cinco puntos que reclaman pero con pocas chances de implementarlo. ¿Qué piden los mandatarios provinciales?
En un contexto de tensión, el presidente de la Comisión de Presupuesto, José Luis Espert, suspendió la reunión de esa comisión que estaba programada para las 15 horas y estableció una conferencia para las 14 horas. Esta es una semana clave, ya que mañana se vence el plazo que tienen ambas cámaras para dictaminar porque a fin de mes finaliza el año parlamentario.
En este contexto, se acrecienta la distancia entre los gobernadores y Javier Milei. Según trascendió, los gobernadores de Juntos por el Cambio (JxC) -impulsados por el mandatario chubutense Ignacio Torres-reclaman cinco puntos.
Estos son: las deudas por las cajas previsionales no transferidas; devolución del 1,9% de los impuestos coparticipables que financiaban la ahora disuelta AFIP; la distribución del Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) que el Ejecutivo no usa; el financiamiento de la compensación del Pacto Fiscal de 2017 y la coparticipación del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL)
Esto puede ser difícil ya que el gobierno nacional sigue aplicando una política de intransigencia que genera un fuerte malestar entre los gobernadores radicales y del PRO y dentro de sus respectivos bloques.
Es sabido que tanto los gobernadores como algunos legisladores prefieren un presupuesto deficiente a que Javier Milei elija no llamar a extraordinarias y dilatar el Presupuesto 2025 hasta marzo.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ya había avisado que no iba a haber ley de presupuesto antes de fin de año y que volverían a utilizar el vigente por segunda vez consecutiva.
Esta sería una opción peor para los gobernadores sería que el presidente elija prorrogar el Presupuesto 2023 nuevamente y pueda manejar a discrecionalidad los gastos del Estado y sus transferencias a provincias.
Los legisladores que responden a los gobernadores más importantes podrían llegar a firmar el dictamen en disidencia el próximo jueves e intentar modificaciones en el recinto. A pesar de esto, la posibilidad de represalias podría frenar este paso.
De no haber avances positivos en la sesión que inicia a las 15 horas, el oficialismo quedará en soledad para presentar los dictámenes. Los gobernadores tienen un haz en la manga y es amenazar con rechazar en el Congreso un decreto clave para Javier Milei que es el DNU 846.
El mismo, necesario para el ministro de Economía Luis Caputo, relaja las condiciones para que su cartera pueda canjear deuda en moneda extranjera sin intervención del Palacio Legislativo.
Según trascendió, el expresidente Mauricio Macri dio luz verde al PRO para apoyar los reclamos de los gobernadores de lo que fue Juntos por el Cambio. Entre ellos Nacho Torres, de Chubut; Rogelio Frigerio, de Entre Ríos y Jorge Macri, de CABA.
Además de los principales mandatarios del PRO, también está el apoyo a Alfredo Cornejo, de Mendoza; Gustavo Valdés, de Corrientes; Leandro Zdero, de Chaco; Carlos Sadir, de Jujuy; Maximiliano Pullaro, de Santa Fe; Claudio Poggi, de San Luis y Marcelo Orrego, de San Juan.
Varios de estos gobernadores, ya habían adelantado que no apoyarían un recorte mayor al sufrido durante el 2024. En este sentido, Maximiliano Pullaro había adelantado que el ajuste necesario ya tuvo lugar y que era necesario que el Gobierno nacional pague las deudas con las provincias.
De acuerdo a los datos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal, hasta octubre el gobierno logró un superávit fiscal por el equivalente al 0,5% del PBI y pasó en los últimos 12 meses, del déficit al superávit.
En octubre se aprecia que 14 de los 16 componentes del gasto tuvieron descensos interanuales en términos reales, es decir descontando inflación.
Los únicos rubros del gasto primero que subieron fueron: asignaciones universales para la protección social +83,4% y transferencias a universidades +74,3%.
Por su parte, los tres componentes del gasto que más cayeron fueron: transferencias de capital a provincias -94,8%, subsidios a otras funciones -84,2% y otros gastos corrientes -80,7%.
En el acumulado enero-octubre del 2024, los tres gastos que más cayeron fueron: transferencias de capital a provincias -97%, inversión real directa -71% y transferencias corrientes a provincias -67,8%.
Asimismo, desde la consultora Politikón Chaco estudiaron el reparto de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) a provincias desde 2017 a 2024. Concepto por el cual los mandatarios provinciales reclaman la coparticipación de los saldos remanentes del año en curso, que hasta noviembre alcanzaría la suma de $ 562.489 millones.
Este fondo no tiene un criterio de reparto estipulado. Es decir, su distribución se realiza a criterio del Poder Ejecutivo Nacional según los pedidos realizados por las provincias en base a la necesidad de recursos para atender situaciones de emergencia y/o desequilibrios financieros.
"Entre enero y noviembre de 2024, el fondo ATN totalizaría $ 610.789 millones (con dato de noviembre proyectado) y los fondos distribuidos alcanzan los $ 48.300 millones; es decir, se repartió el 7,9% del fondo en cuestión", indicaron desde la consultora.
Solo en este 2024, el saldo no distribuido, en moneda constante, alcanza los $ 661.503 millones. Esa es la cifra que hoy están disputando los gobernadores.
Si bien hay volatilidades según los años en análisis, el acumulado de ATN repartidos a los distritos entre 2017 y el parcial enero-noviembre del 2024 muestra que la provincia de Buenos Aires se quedó con la mayor porción, aunque no tiene una gran diferencia con el resto.
El distrito bonaerense concentró el 13,5% de los ATN distribuidos, seguido luego por Santa Fe con el 8% y Córdoba completa el podio con el 6,9%. En el extremo opuesto, Neuquén (1,9%), Tierra del Fuego (1,2%) y CABA (0,2%) son los de menor participación en la distribución de ATN en el acumulado de período analizado.
