Florida implementó una nueva legislación que afecta directamente a inmigrantes y homeless. La Ley HB 1365, promovida por el gobernador Ron DeSantis, prohíbe dormir en espacios públicos, como aceras, parques o playas. Esta medida, presentada como una solución a los problemas asociados con la indigencia, ha generado gran controversia en Estados Unidos, especialmente entre organizaciones defensoras de derechos humanos y comunidades afectadas.
Antes de enero de 2025, los gobiernos locales deberán desarrollar programas para asistir a las personas sin hogar. De incumplir con los requisitos establecidos, los condados podrían ser demandados por residentes, empresas o incluso por la fiscalía estatal. A pesar de tener el respaldo de los republicanos, la normativa ha sido señalada como una medida que invisibiliza a inmigrantes y homeless. Asimismo, muchos critican que los 30 millones de dólares asignados para abordar la problemática son insuficientes.
La Ley HB 1365 prohíbe que las personas sin hogar acampen o duerman en espacios públicos. Además, la normativa de Ron DeSantis contempla habilitar campamentos en caso de que los refugios de Florida estén completamente llenos. Estos albergues deberán contar con autorización estatal y cumplir con requisitos básicos, como acceso a agua potable, baños limpios y medidas de seguridad.
Por otro lado, el estatuto promete garantizar la seguridad pública y mejorar la calidad de vida en las comunidades, según informó el senador republicano Jonathan Martin. Y DeSantis comentó que la medida busca prevenir que Florida siga los pasos de ciudades como San Francisco, donde los campamentos de personas sin hogar se han convertido en un problema visible y complejo.
Pero los detractores consideran que la Ley HB 1365 no aborda las causas principales de la indigencia, como la falta de viviendas asequibles o el impacto de la violencia doméstica. En ese sentido, la senadora demócrata Shevrin Jones afirmó que esta medida oculta la verdadera problemática.
PUEDES VER: Atención conductores: la NUEVA LEY de Florida aprobada por Ron DeSantis que cambiará las reglas en 2024
En Florida se estima que hay más de 31.000 homeless. La Ley HB 1365 ha puesto en jaque a los municipios, especialmente a las áreas metropolitanas como Miami-Dade y Fort Lauderdale. Ahora los gobiernos locales tendrán que implementar programas para atender la falta de vivienda en Estados Unidos. No obstante, muchos consideran que los recursos asignados son insuficientes. Por ejemplo, algunos condados han recibido menos de 60.000 dólares para enfrentar el desafío.
En respuesta, ciudades como Miami-Dade han tomado medidas innovadoras, como convertir hoteles en refugios y adquirir casas prefabricadas. Sin embargo, las preocupaciones persisten. Jacob Torner, del grupo TaskForce for Ending Homelessness, señaló que esta ley de Ron DeSantis podría dificultar aún más el acceso de inmigrantes y personas sin hogar a los servicios que necesitan, como atención de salud mental o rehabilitación por abuso de sustancias.
