En la rueda de prensa oficial de la F1 antes del Gran Premio de
Singapur el pasado mes de septiembre,
Max Verstappen se vio envuelto en una tormenta mediática tras sus declaraciones. El holandés uso una expresión malsonante ("
fuck") y fue duramente criticado por la prensa. El presidente de la FIA,
Mohammed Ben Sulayem expresó su preocupación por la cantidad de lenguaje grosero que es transmitido en la F1. Desde la FIA se entiende que el lenguaje malsonante extraído de las 'TeamRadio' de los pilotos durante la carrera está excluido de culpa. Sin embargo aquel piloto que use un lenguaje grosero en actividades extradeportivas será sancionado con una multa y/o servicio comunitario.
Seguir leyendo...