Los tradicionales Premios Pelayo que entrega cada año a juristas de reconocido prestigio el foro jurídico homónimo han celebrado su XXX edición con un sentido y emotivo homenaje a la carrera como abogado de Miquel Roca.
Un jurista que no es cualquiera ya que es uno de los principales autores de nuestro texto constitucional, los conocidos como siete padres de la Constitución, y el último testigo y parte de las discusiones y el ingente trabajo que precedió el alumbramiento de la Carta Magna de 1978.
Roca ha señalado que la "grandeza" de la abogacía está en que los que a este oficio se dedican comparten "una visión particular de un servicio público".
El socio fundador y presidente de honor del bufete RocaJunyent defendió que el Derecho es también una "expresión de libertad" y este debe estar en todo momento "al servicio del interés general" y "comprometido con la causa pública".
Se reconoció a sí mismo como un "privilegiado por haber podido dedicar mi vida profesional al servicio del Derecho", lo que, confesó, es la "vocación" que construyó "desde el compromiso con la democracia, la libertad y la Justicia".
El protagonista de la gala se mostró también reconfortado porque "cuando una sociedad, un país, quiere reconocerse a sí mismo como una garantía de seguridad y libertad" se constituye, primero, y se define, después, como "un Estado de Derecho".
Y si, añadió, además, entra en la ecuación la expresión "social" -como ocurre con España como estado social de derecho que es-, "los abogados sabemos que el progreso y la convivencia será desde el Derecho que van a garantizarse".
Roca indicó como otra de las misiones a la que debe servir y sirve el ejercicio de la abogacía como labor profesional es la de "aprender a convivir en libertad", también, apuntó, "desde el respeto a la diferencia".
Este reconocido hombre del mundo de las leyes, que ahora tiene 84 años, recordó los años de la Transición en que él ocupó un papel destacado para advertir que "la abogacía también estaba allí".
Animó el galardonado a las autoridades presentes y al conjunto de la sociedad a tratar de superar los "momentos difíciles" que hoy se viven "desde el diálogo y el pacto" y sin dejar nunca de lado "el respeto que ennoblece la discrepancia".
"El Derecho al servicio de la convivencia, se impondrá y ganará", predijo como broche final a su intervención, ante el sonado aplauso de las varias decenas de asistentes.
No ha faltado representación de la cúpula judicial, del presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y la presidenta del Tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Isabel Perelló.
También han estado acompañando a Roca representantes de las más altas instituciones del Estado, como la tercera máxima autoridad de nuestro país, la presidenta del Congreso, Francina Armengol; el ministro de Justicia, Félix Bolaños; la del Consejo del Estado, Carmen Calvo; la responsable del Tribunal del Cuentas, Enriqueta Chicano y el defensor del pueblo, Ángel Gabilondo. Por su puesto, ha estado, asimismo, el presidente de Pelayo, Francisco Lara.