Explorar el poder y la crueldad de las redes sociales. Ésa fue la intención de Molly Taylor cuando escribió ' Cacophony ', una obra estrenada hace cuatro años por la joven compañía del Teatro Almeida de Londres y que llega ahora al Teatro de La Abadía (del 15 al 24 de noviembre) en una producción que se estrenó, en catalán, en la Sala Beckett de Barcelona a principios de este año. Anna Serrano Gattell ha realizado junto a Oriol Puig Grau la versión y dirige la función, que interpretan Martí Atance, Laia Manzanares, Mariona Pagès, Chelís Quinzá, Clara de Ramon, Mima Riera y Clara Sans. La directora cuenta que la obra es la historia de Abi, una joven que acude a una manifestación en contra de la absolución de un futbolista acusado de violación, en la que su mejor amiga, tras un atentado terrorista, sufre un accidente; Abi publica entonces en sus redes sociales un texto, «muy emocional y muy político», que se hace viral y la convierte en una figura pública, al tiempo que la instala en el punto de mira. Una mentira desencadena su «bajada a los infiernos, su hundimiento y cancelación». «Me fascinó -dice Anna Serrano Gattell de 'Cacophony'- cómo Molly Taylor diseccionaba el uso que hacemos de las redes sociales y los medios de comunicación: espacios de expresión que a menudo se convierten en vertederos de ataques anónimos; en terrenos digitales -pero muy reales-donde la violencia y el odio circulan sin ningún control. Es un texto muy vivo y desacomplejado que pone sobre la mesa cuestiones que nos rodean desde hace tiempo. Hoy es de una contemporaneidad tan acaparadora que da miedo». La obra está inspirada por las ideas del libro de Jon Ronson 'So You've Been Publicly Shamed' (su título en castellano es 'Humillación en las redes'). «Cuando las vergüenzas públicas se producen como ataques con aviones teledirigidos -escribe el autor-, nadie necesita pensar en lo feroz que podría ser nuestro poder colectivo. El copo de nieve nunca necesita sentirse responsable de la avalancha». Asegura la directora que su puesta en escena intenta ser «esencial» y «con muy pocos elementos en escena. Con un simple jarrón con flores ya contamos que estamos en un hospital». La interpretación es la base de la función. Los siete actores (en Londres fueron dieciocho) interpretan los veinticinco personajes que tiene el texto. Clara de Ramón , que interpreta a Abi, asegura que la puesta en escena es «muy dinámica, muy 'tik tok'; se cuenta su vida a través de fragmentos». Molly Taylor ha explicado que Abi «fue moldeada por numerosas influencias contemporáneas como el #MeToo», y asegura que con el #SeAcabó –hahstag aparecido tras el escándalo de la selección española de fútbol femenino– se actualiza el texto. «Más que nunca, las ideologías chocan en los campos de batalla en línea. 'Cacophony' ahonda en lo vulnerables que somos ante el poder y la presión de las redes sociales, en la facilidad con la que nuestras personalidades en línea pueden construirse y, con la misma facilidad, desmoronarse». Creada para una compañía de intérpretes jóvenes, la obra conecta especialmente, según la experiencia en Barcelona de los actores españoles, con los espectadores jóvenes –La Abadía ha programado dos funciones matinales para institutos, los días 15 y 20 de noviembre–. «Es una obra que genera debate –coinciden directora e intérpretes–, el encuentro con el público es fundamental en esta función». Las redes sociales no salen -cuenta Anna Serrano Gattell- muy bien paradas en este texto; «más que para comunicar, sirven para lanzar mensajes de odio». Pero ¿ha variado la relación de los actores con las redes sociales después de interpretar esta función? «Yo soy igual de adicto, pero ahora soy consciente», dice Chelís Quinzá . «Yo no me las tomo ahora en serio», añade Clara Sans .