Este 5 de noviembre, las autoridades peruanas, en colaboración con la Interpol, lograron recapturar a Majid Azizi, un ciudadano iraní de 56 años, en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez. La detención se produjo tras su deportación desde Colombia, donde previamente había sido arrestado bajo sospechas de estar involucrado en actividades terroristas en marzo de este año.
La captura se produjo después de que el iraní se ausentara de una audiencia programada en Perú, lo que llevó al Poder Judicial a revocar la medida de comparecencia con restricciones y emitir una orden de prisión preventiva. Azizi, quien había sido liberado bajo ciertas condiciones, se trasladó a Colombia sin aviso y desobedeciendo las órdenes judiciales, lo que agravó su situación legal en el país.
En marzo de este año, la Dirección contra el Terrorismo (Dircote) informó que Azizi estaba implicado en un supuesto plan para atentar contra el empresario israelí Malka Shachar, con negocios en Cusco. Además, se especuló sobre posibles planes para el Foro APEC 2024, aunque esta última hipótesis fue descartada por falta de pruebas concretas. Inteligencia israelí habría alertado a las autoridades peruanas sobre sus presuntos vínculos con la Fuerza Qods, la rama de operaciones extranjeras de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán.
Azizi había sido arrestado en Perú junto con tres cómplices peruanos en el marco de la llamada "Operación Perú". Sin embargo, la Corte Superior Nacional de Justicia Penal revocó inicialmente la prisión preventiva, lo que permitió que enfrentara el proceso en libertad. Según el exjefe de Dircote, coronel Max Anhuamán, había evidencias sólidas que vinculaban a Azizi con actividades terroristas, entre ellas la entrega de dispositivos electrónicos a sus cómplices con información sensible sobre sus objetivos.
La fuga de Azizi ha puesto en alerta a las autoridades de seguridad y migración en el país, ya que, tras el incidente, se está revisando el protocolo de actuación ante casos de personas con antecedentes internacionales de este tipo. Desde el Ministerio del Interior, se ha anunciado que se reforzarán los controles y medidas para evitar situaciones similares en el futuro.
Asimismo, se ha informado que el presunto terrorista será trasladado a una sede de máxima seguridad para su custodia, mientras se analiza su posible extradición y se gestiona su permanencia en custodia hasta que su situación sea clarificada.