El expresidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris han empatado en la histórica localidad de Dixville Notch. El pequeño pueblo ubicado en el noreste del país, con una tradición que data desde 1960, registró el primer voto en las elecciones de Estados Unidos. En la medianoche, los seis votantes de Dixville Notch depositaron sus papeletas, resultando en un empate de tres votos para cada candidato. Este suceso parece corroborar las encuestas que anticipan una contienda reñida en los estados clave del país.
En las elecciones de 2020, Joe Biden había ganado en esta misma localidad con un contundente cinco a cero. A lo largo de los años, solo dos presidentes han logrado obtener todos los votos de sus habitantes: Richard Nixon en 1960 y Joe Biden en 2020. A medida que los colegios electorales abren en el resto del país, se anticipa que los resultados de esta jornada electoral serán seguidos de cerca, especialmente en los estados considerados bisagra.
El empate en Dixville Notch no solo es un evento simbólico, sino que también pone de manifiesto la polarización que caracteriza las actuales elecciones en la actualidad. Con un número tan reducido de votantes, cada voto cuenta. Este fenómeno se ha visto reflejado en las encuestas con los márgenes que son extremadamente ajustados en varios estados clave.
Las encuestas recientes, recopiladas por el portal FiveThirtyEight, indican que Trump tiene una ligera ventaja de dos puntos en Arizona, mientras que en otros estados bisagra como Pensilvania, Míchigan, Wisconsin, Georgia, Carolina del Norte y Nevada, los márgenes son de un punto o menos. Esta situación sugiere que el resultado final podría depender de un número limitado de votos en estos estados, lo que podría llevar a un recuento prolongado si los resultados son demasiado ajustados.
La tradición de votar en los primeros minutos de la jornada electoral en Dixville Notch se ha convertido en un ritual que atrae la atención de los medios y de los analistas políticos. Este pequeño pueblo ha sido un barómetro de las tendencias electorales a nivel nacional, y su historial de resultados ha sido relativamente alineado con el voto popular en elecciones anteriores. La atención que recibe cada ciclo electoral subraya la importancia de este evento en el contexto más amplio de la democracia estadounidense.
A medida que los colegios electorales abren en todo Estados Unidos, se espera que la jornada electoral de hoy sea una de las más observadas en la historia reciente. Con la posibilidad de que los resultados sean muy ajustados, el país podría enfrentar días de incertidumbre mientras se cuentan y tabulan las papeletas en los estados más competitivos.