Nacional venció como local a Malvín en cifras de 84-67 (17) y consiguió su segunda victoria al hilo, pisando firme en el arranque de la temporada.
Desde el inicio se notó una superioridad de Nacional, que abría la noche con un 6-1 de la mano de un Espíndola físico y dinámico, junto a Manny que sacaba a relucir toda su clase. Para la suerte de López, los foráneos de Malvín no tardaron en sumarse a la lista de goleadores, y entre Guyton y Hilliard lograron igualar y mantenerse cerca. Esto se repitió más adelante, ya que Semiglia encontraba cinco puntos consecutivos, que de nuevo serían empatados, ya que la intensidad era muy alta en ambos equipos. Esto inevitablemente llevó a una doma de por lo menos tres minutos; y el ingreso de Feldeine en el local le dio la pausa necesaria al juego, consiguiendo el Bolso un 12-0 para cerrar el primero en 27-18 (9).
Dos vueltas de reloj pasaron en el segundo para que llegaran los primeros puntos, y estos vendrían de Guyton en la visita. La respuesta del Tricolor fue una hundida de Ottonello, pero los de Ponce no encontraron más gol hasta pasado el ecuador del chico, ya que reinó la imprecisión y el apuro. En ese período, Malvín realmente no pudo aprovechar para sacar una ventaja real, puesto que solamente puso un 5-0. Espíndola y Feldeine, ambos con libres, sacaban del pozo a Nacional; y si bien Souberbielle respondía en el visitante, el mismo Gianfranco, acompañado del Baldosa y Semiglia lograban aceitar nuevamente el juego del Bolso, lo que llevó a abrir once y cerrar la primera mitad en 44-33.
El arranque del tercero fue trabado, pero cuando los de La Blanqueada pisaron el acelerador lograron quebrar el cotejo. Si bien existían intercambios en la pintura, con Colmenares a la cabeza en el local, y Marcel con Capalbo atacando el aro, los triples llegaron para Nacional. Sarni y Feldeine, en dos posesiones consecutivas, abrieron 17 con una bomba cada uno. Malvín no se quería quedar atrás, y el mismo Lucas fue el que ahora se animó a anotar desde larga distancia. Sin embargo, Espíndola estaba prendido fuego, y con cinco al hilo, junto a una bandeja de Suárez, el Bolso abría 21. Cerrando el tercero hubo rotación de jugadores, lo que bajó unos cambios en el ritmo. En este momento fueron los de López los que se sintieron mejor, aprovechando a Guyton y al Hueso Martínez para bajar de veinte. Pero con un gol y foul se terminaba el chico, con Nacional arriba por 70-48 (22).
El último cuarto se jugó para cumplir con lo reglamentario, y a pesar de que ya se notaba que el encuentro era cosa juzgada, los propios jugadores así lo hicieron sentir. Un triple del Pato Prieto le daba al Tricolor 25 de renta, pero no volvería a sumar hasta cuatro minutos después, ya que la presión de ganar no estaba y hubo un bajón al momento de la selección de tiro. En este período Malvín tampoco fue muy efectivo, y se destacó Martínez, quien encontraba espacios para cortar hacia el aro y anotar. Lo mismo sucedió con Arregui y posteriormente Kiril, ya que Ponce había rotado el quinteto y no tenía un referente grande para cerrar la pintura. El ingreso de pibes caracterizó el cierre de un juego que ya llevaba un buen rato definido. El score final fue 84-67 (17).
MVP: Manny Suárez
Si se tuviera que definir el concepto de triple amenaza en un jugador, sería él. Hizo un partidazo, ya que no solo tiró sus kilos a la pintura, sino también se desempeñó de buena manera botando y tirando desde el perímetro. Es impredecible. Plasmó 18 puntos, 8 rebotes y 1 asistencia. Mención especial para Espíndola, quien con su juego físico y energía ilimitada es el alma del equipo al momento de elevar el ritmo en transición.
ESTADÍSTICAS
Por cuartos: Nacional 27-18, 44-33, 70-48, 84-67
Jueces: A. Barthel, A. Godoy, N. Revetria
GALERÍA MARCOS FERREIRA
La entrada Ahora son dos se publicó primero en Basquet Caliente.