Los estadounidenses y el mundo entero están atentos a los resultados de las elecciones presidenciales de 2024, donde Donald Trump y Kamala Harris compiten por la presidencia en una carrera extremadamente cerrada. Las encuestas y sondeos previos mostraron una ligera ventaja que ha ido cambiando constantemente, aumentando la tensión mientras los resultados oficiales aún no se han revelado.
El Colegio Electoral, encargado de decidir al próximo presidente, depende del respaldo obtenido en estados clave. Lugares como Pensilvania, Florida, Michigan, Georgia, Arizona, Nevada y Wisconsin son decisivos y podrían definir el futuro del país. Hasta el momento, con ambos candidatos en un escenario de alta paridad, los ojos están puestos en cada voto que podría inclinar la balanza en esta histórica elección.
Los resultados oficiales todavía están en desarrollo, y el conteo en los estados bisagra será crucial para definir al ganador. La importancia de estos estados radica en el sistema electoral de Estados Unidos, donde alcanzar los 270 votos del Colegio Electoral es esencial para asegurar la presidencia. A medida que se contabilizan los votos, las proyecciones se actualizan, manteniendo la expectativa alta y al público a la espera de noticias definitivas.
