Marcao Texeira fue el protagonista del Sevilla FC el pasado domingo ante la Real Sociedad, y no precisamente por un buen motivo. El central brasileño partió de inicio junto a Kike Salas ante las bajas de Badé y Nianzou . El técnico Xavi García Pimienta se ha propuesto la firme tarea de recuperar a todos los jugadores que pueda del vestuario nervionense. Carmona o Nianzou son claros ejemplos de esta política. Con Marcao también lo está intentando e incluso las lesiones del brasileño le están medio respetando. Además, el club lo ha nombrado capitán este año con intención de reforzar su figura tras haber sido un descarte en verano. No obstante, es el propio jugador es que se está boicoteando con sus decisiones dentro del campo. Ante los donostiarras, el central provocó un clamoroso penalti , que eliminó de una estocada las posibilidades de puntuar de su equipo. Tras esto, Pimienta decidió sustituirle, de forma que quedó señalado por el técnico ... y también por la afición. La grada no dudó en pitar al jugador en el momento que salía del césped, algo que dejó muy tocado al jugador que no dudó en mostrar su desolación tras el pitido final del encuentro. No es el único partido en el que Marcao ha ido en contra de los intereses de los suyos. El brasileño quedó retratado también ante el Villarreal, en la jugada que supuso el 1-2 de Ayoze. En un balón aparentemente sin peligro se tiró para no tocar el balón y el rebote le cayó al tinerfeño. Ante el Getafe, tampoco firmó un gran encuentro y sus pérdidas de balón pudieron hacer perder los tres puntos al grupo. Este errático rendimiento ha provocado que el jugador vuelva a sentarse en el banquillo y que Nianzou sea, a día de hoy, la pareja de baile de Badé. Hasta después del parón de selecciones no se espera que el Sevilla recupere a sus centrales. De ahí la importancia de que un jugador con la experiencia del brasileño diera la cara. No obstante, Pimienta se encuentra ante la difícil situación de darle un voto más de confianza ante el Leganés o improvisar un nuevo centro de la defensa. El catalán no tiene mucho margen de actuación, podría recurrir a Gudelj y Kike Salas o tirar de la cantera, tal y como hizo ante Las Rozas. Una restructuración arriesgada tras la imagen ofrecida ante la Real. El Sevilla FC necesita como el comer una victoria solvente y balsámica antes del parón liguero e ir recuperando efectivos.
