Las uñas son una parte esencial de nuestro cuerpo, ya que no solo proporcionan protección física, sino que también actúan como un indicador de nuestra salud general. Su apariencia puede variar según factores como la nutrición, la hidratación, el estrés y enfermedades subyacentes. Es por ello que muchas personas no se percatan de las señales que pueden aparecer con el tiempo, sobre todo cuando esta estructura protectora presenta rayas llamativas.
En ese sentido, es de entero conocimiento que los seres humanos tienen diferentes formas de uñas, tanto en los dedos de las manos como en los de los pies. Estos elementos externos reflejan el estilo de vida que llevamos y pueden alertar sobre aspectos de nuestra salud.
Para sorpresa de muchos, tener uñas con rayas, también conocidas como estrías o líneas, puede tener varios significados en relación con la salud. Según el medio estadounidense especializado en salud Healthlife, un estudio clínico realizado en 2015 sobre personas adultas mayores indicó que estas líneas suelen aparecer debido a un retroceso en la velocidad de regeneración celular. Esto ocurre cuando las nuevas uñas deben reemplazar a las células muertas en la superficie de la piel.
Por otro lado, también manifiestan problemas de circulación, enfermedades sistémicas relacionadas con la diabetes o dificultades en el estado pulmonar, y un bajo nivel de nutrición, lo cual indica una falta de nutrientes esenciales como proteínas y vitaminas.
Además, la Cleveland Clinic publicó un artículo en el que señaló varias problemáticas comunes que están directamente relacionadas con las rayas en las uñas y la salud del organismo. En primer lugar, destacó que no siempre representan un indicio de enfermedades, ya que pueden ser parte del proceso natural de envejecimiento. Sin embargo, se recomienda realizar un seguimiento regular de las uñas para anticiparse a posibles diagnósticos en el futuro.
A medida que pasa el tiempo, las personas envejecen y pierden elasticidad en la piel, lo que también provoca que las uñas presenten deficiencias nutricionales, particularmente de vitaminas A y B, o de minerales esenciales como el zinc y el hierro, explican expertos del mencionado centro de salud.
Asimismo, resaltó que las rayas horizontales están asociadas a la enfermedad de Beau, que se caracteriza por la interrupción en el crecimiento de las uñas. También existen varios factores que pueden contribuir a su aparición, como los tratamientos de quimioterapia, los daños ocasionados por el uso prolongado de manicura con gel, el uso de uñas postizas, los traumatismos y enfermedades como la vascular periférica, así como condiciones de salud como Fiebre alta, neumonía o varicela.
Se recomienda que, antes de aplicar cualquier tratamiento casero, se consulte a un médico de confianza para identificar las afecciones que puedan estar alterando la salud de las uñas. Si no se trata de un síntoma grave, se debe tomar en cuenta lo siguiente:
