En el Atlético de Madrid se ve el vaso medio lleno en lo referente a la lesión de Clement Lenglet. Las pruebas médicas han confirmado que no hay nada roto después del choque que sufrió anoche con Witsel, por lo que no será una lesión de larga duración, si bien está claro que añade un nuevo problema más en la zaga para Simeone.
Lenglet, según ha informado el club, se ha sometido a nuevos chequeos que han diagnosticado un esguince grado I del ligamenteo colateral interno de la rodilla i zquierda, y un esguince grado I/II en el ligamento deltoideo del tobillo izquierdo. "El jugador comenzará a realizar tratamiento de fisioterapia y trabajo de readaptación, y queda pendiente de evolución", explica el Atleti en un comunicado.
Si bien el club no ha determinado tiempo de baja, es indiscutible que Lenglet estará varios partidos en el dique seco. Los tiempos de recuperación de estas dolencias suelen estar entre las cinco y seis semanas, por lo que es posible que no regrese hasta diciembre.
Con doble partido esta semana por el regreso de la Champions League, el Atlético suma una baja más en la zona defensiva que se une a la casi segura de Le Normand, que sigue sin reaparecer tras el traumatismo craneoencefálico que sufrió frente al Real Madrid en septiembre, y la duda de César Azpilicueta, todavía con problemas musculares.
