Aunque desde España se pueda tener la sensación de que Bolivia es un país que no tiene un gran atractivo turístico, lo cierto es que en esta nación de Sudamérica sin salida al mar hay auténticas maravillas que para muchos son unas grandes desconocidas. Por supuesto, la joya de la corona del Altiplano no es otra que el monumental Salar de Uyuni, un descomunal desierto de sal que no tiene comparación en todo el mundo.
Este impresionante paraje árido de más de 10.000 kilómetros cuadrados de extensión es más grande que la Comunidad de Madrid y similar en tamaño al Principado de Asturias o Navarra. Su tamaño es tan colosal que incluso se puede ver desde el espacio, y sin duda es uno de los parajes más impresionantes de todo el continente. Es de esos lugares que hay que visitar al menos una vez en la vida.
El Salar de Uyuni se ubica en Potosí, a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar. Se calcula, según la propia web del paraje, que hay unas 10.000 toneladas de sal entre sus capas. Además, justo debajo de su pantagruélica extensión hay profundas capas de sedimentos, así como unas enormes cantidades de litio (el 70% de la reserva mundial se encuentra ahí).
Situado en la Reserva Nacional de Vida Silvestre Andina Eduardo Avaroa, los más de 24.000 visitantes que se adentran en el imponente Salar de Uyuni cada año pueden realizar inolvidables actividades mientras contemplan la inmensidad de este impresionante lugar. Por ejemplo, pueden adentrarse en las abandonadas locomotoras del cementerio de trenes, que no hace más que añadir misticismo a esta maravilla.
Además, dentro del Salar de Uyuni hay enclaves igual de increíbles que el propio desierto de sal, como el curioso Valle de Rocas, en el que las formaciones geológicas tienen un aspecto muy inusual por la actividad volcánica, aunque si hubiera que destacar una sería el fotografiado Árbol de la Roca; también es una parada imprescindible el llamado Sol de la Mañana, un paraje casi lunar plagado de géiseres.
En el Salar de Uyuni también puedes encontrar varios lagos que rompen con la aridez y la blancura de este paisaje tan imponente. La Laguna Colorada, con una tonalidad rosácea provocada por el alga predominante en sus aguas, es la más destacada de todas y deja perplejos a los turistas que se acercan a su orilla. Además, en ella que se pueden de manera bastante habitual numerosos flamencos.
En la página web oficial del Salar de Uyuni puedes consultar todos los tours que se pueden hacer por este descomunal lugar, así como algunos consejos muy útiles para la visita, ya que no deja de estar a mucha altitud respecto al nivel del mar. Pero ni su imponente aspecto ni su ubicación evitan que sea uno de los lugares más fascinantes de todo el planeta.