En Perú, una nueva megaobra está lista para transformar el acceso a uno de los sitios arqueológicos más enigmáticos del país, con una inversión de 220 millones de dólares. Esta ambiciosa construcción conectará las regiones de Cusco y Apurímac y mejorará significativamente la infraestructura turística en la zona. Según ProInversión, el proyecto reducirá el tiempo de viaje a tan solo 15 minutos, lo cual optimizará el transporte hacia este destino que, hasta ahora, ha sido difícil de alcanzar. Además de facilitar el acceso, se espera que el proyecto genere más de 15 000 empleos directos e indirectos, lo que impulsará la economía local y promoverá el turismo a gran escala.
El nuevo Teleférico de Choquequirao es un proyecto que tiene el potencial de transformar el turismo en la zona sur del Perú. Este ambicioso plan, cuya concesión se estima en 22 años, busca incrementar exponencialmente el número de turistas que visitan el Parque Arqueológico de Choquequirao, pasando de unos 8 000 visitantes anuales a más de un millón, según ProInversión. La afluencia de turistas tendrá un impacto positivo en la economía local y promoverá un incremento en la demanda de servicios turísticos como alojamientos, transporte, gastronomía y guías.
El teleférico, que se extenderá desde Cusco hasta Apurímac, contará con estaciones en Yanama y Huanipaca, conectando estos puntos a través de dos líneas principales. La primera línea cubrirá 3 452 metros, mientras que la segunda abarcará 1 991 metros, lo cual permitirá un acceso rápido y seguro al complejo arqueológico. Este proyecto permitirá a los turistas disfrutar de la belleza cultural y natural de Choquequirao sin los obstáculos de la actual ruta de trekking, que puede tomar entre tres y cinco días.
Este teleférico representa la inversión más grande en infraestructura turística realizada en Perú bajo una Asociación Público-Privada (APP). Los 220 millones de dólares invertidos superan ampliamente los presupuestos destinados a otros proyectos turísticos en el país, como el sistema de telecabinas de Kuélap. ProInversión y el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR) han destacado que este proyecto forma parte de los esfuerzos por reactivar el turismo tras la pandemia, con el objetivo de recibir 4,4 millones de turistas para el 2024 y lograr los niveles de visitas prepandemia.
Además, la obra incluirá la construcción de carreteras y otras infraestructuras necesarias para facilitar el transporte y la estadía de los visitantes. Se estima que, al estar en pleno funcionamiento, el teleférico generará más de 15,000 puestos de trabajo en las regiones de Cusco y Apurímac, beneficiando directamente a las comunidades locales y contribuyendo a la reducción de la pobreza.
Conocido como la 'hermana de Machu Picchu', el sitio arqueológico de Choquequirao ha sido durante mucho tiempo un destino poco explorado debido a su ubicación remota. Este impresionante complejo incaico se extiende sobre 5,227 hectáreas y se encuentra en la cadena montañosa de Vilcabamba, a una altitud de aproximadamente 3,500 metros. A pesar de su importancia histórica y su singularidad arquitectónica, la dificultad de acceso ha limitado su popularidad entre los turistas.
El proyecto del teleférico no solo facilitará el acceso, sino que también permitirá a los visitantes experimentar la magia de este sitio incaico en una fracción del tiempo. Con estructuras similares a las de Machu Picchu, Choquequirao ofrece a los turistas una oportunidad única de explorar ruinas bien conservadas en un entorno natural y culturalmente rico, sin la afluencia masiva de turistas que se observa en otros sitios arqueológicos.
El Parque Arqueológico de Choquequirao se ubica en la región central occidental del Cusco, cerca del río Apurímac, en un entorno natural que ofrece vistas panorámicas de la selva y las montañas andinas. Este sitio, cuyo acceso desde Cusco es actualmente un desafío, se espera que pronto se convierta en un destino de fácil acceso, gracias al teleférico.
El proyecto Teleférico de Choquequirao no solo promete transformar el turismo en el Perú, sino también ofrecer una alternativa a Machu Picchu, posicionando a Choquequirao como un destino turístico de clase mundial. Con esta iniciativa, el Perú reafirma su compromiso de preservar y promover su patrimonio cultural, al tiempo que se fortalece la economía regional a través del turismo y la inversión extranjera.