República Dominicana.- El colágeno ha sido ampliamente publicitado por sus propiedades antienvejecimiento, pero, ¿realmente ayuda a prevenir el envejecimiento? ¿Qué es exactamente?
Al menos el 30% del cuerpo (piel, huesos, tendones, órganos) está compuesto de colágeno, una proteína del tejido de soporte de la piel que ayuda a darle firmeza y elasticidad.
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Con el paso del tiempo el organismo de una persona puede producir esta proteína en menor cantidad, esto puede causar flacidez y adelgazamiento de la piel, así como el desarrollo de arrugas, lo que hace que se vea más envejecida.
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Gran parte de la industria antienvejecimiento se centra en el mantenimiento o, con suerte, en la regeneración de este.
Sin embargo, esta proteína no solo está disponible en forma de complementos alimenticios de venta libre, como cápsulas o polvo, también se puede consumir directamente a través de la algunos alimentos como la gelatina y los malvaviscos.
Según la dermatóloga Dawn Marie R. Davis, de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota, los estudios son inciertos en cuanto a los beneficios de consumirlo por vía oral, ya sea a través de la dieta o de complementos.
Puesto que a menudo, cuando se realizan investigaciones no se efectúan o no se pueden hacer en humanos, sino con una cantidad inviable para su dieta o hábitos diarios a lo largo del tiempo.
La dermatóloga aconseja que antes de considerar productos tópicos de colágeno como sueros e hidratantes, se debe tomar en cuenta que es una proteína grande con una estructura compleja que no puede ser absorbida directamente por la piel.
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Advierte que los productos de venta libre pueden etiquetarse con términos sofisticados, como «péptidos altamente hidrolizados», que afirman que su estructura química es más absorbible en la mucosa intestinal o en la superficie de la piel, lo que lo hace aparentemente más activo.
La especialista aclara que los productos tópicos que no se consideran medicamentos, no están registrados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, su sigla en inglés) al igual que los medicamentos que necesitan prescripción médica.
Del mismo modo, explicó que los complementos orales no están regulados por la FDA de la misma manera que los alimentos y medicamentos orales.
La dermatóloga entiende que con numerosos productos disponibles en el mercado, es difícil decir cómo han sido probados, sus composiciones y si estos ingredientes son útiles, neutros o potencialmente dañinos.
Sin embargo, expone que en la dermatología y cirugía plástica, al igual que en las cirugías de cara, oídos, nariz y garganta, el colágeno y los rellenos dérmicos se administran mediante otros métodos de tratamiento en el consultorio, como inyecciones.
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Por lo tanto, indica que si alguien está interesado en las propiedades antienvejecimiento y desea aportar más volumen a las capas más profundas de la piel, lo recomendable es una intervención médica con prescripción o un tratamiento activo en el consultorio de un médico, en lugar de tratamientos orales o tópicos de venta libre.
Reitera que la persona debe consultar a su equipo de atención médica para obtener más información.
En conclusión se desconoce si la complementación tópica u oral es beneficiosa para fines antienvejecimiento. No existe una píldora mágica para revertir el envejecimiento.
Por eso para evitar el envejecimiento precoz se debe tomar en cuenta que la exposición al sol es una de las principales causas de arrugas, especialmente para las personas con piel clara. Y fumar causa el estrechamiento de los vasos sanguíneos en las capas externas de la piel y daña el colágeno.
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La forma más efectiva de apoyar su antienvejecimiento es evitar fumar y exponerse al humo de segunda mano, limitar el consumo de alcohol y utilizar protector solar constantemente.
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