Investigadores de la Universidad de Arizona han descubierto que el 90% de los teléfonos celulares que se utilizan a diario tienen microorganismos potencialmente peligrosos. Llevar el teléfono al baño se ha convertido en una rutina para muchas personas; sin embargo, científicos han alertado sobre los riesgos para la salud que esta práctica conlleva. Diversos estudios confirman que los dispositivos móviles están contaminados con bacterias y virus que podrían generar enfermedades graves.
Además de los riesgos sanitarios, los expertos en salud destacan que el uso prolongado del celular en el baño puede tener consecuencias físicas. Permanecer sentado por largos períodos en la taza del inodoro mientras se navega en el teléfono puede generar problemas musculoesqueléticos, afectando la calidad de vida de quienes mantienen esta costumbre.
Estudios han revelado que el teléfono móvil es uno de los dispositivos con más exposición a gérmenes. Su uso constante en distintos lugares, incluidos espacios poco higiénicos como el baño, facilita la acumulación de bacterias en su superficie. Según la investigación de la Universidad de Nueva Gales del Sur, las personas tocan sus rostros unas 23 veces por hora, lo que aumenta la posibilidad de que esos microbios lleguen a zonas sensibles como los ojos, la boca o la nariz.
Esto es particularmente preocupante cuando se considera que los baños son espacios donde proliferan bacterias como la E.coli, conocida por provocar diarreas e infecciones graves. El 16% de los teléfonos analizados por la Universidad de Arizona presentaba restos de materia fecal. Estas bacterias y virus que se acumulan en los teléfonos pueden causar desde resfriados hasta enfermedades más graves como hepatitis o gastroenteritis. Además, muchos de estos patógenos son resistentes a los antibióticos, lo que complica su tratamiento.
El uso prolongado del celular en el baño no solo es un riesgo higiénico, sino también un peligro para la salud física. Expertos, como el Dr. Roshini Raj, gastroenterólogo de NYU Langone, han advertido que sentarse durante periodos prolongados mientras se utiliza el móvil en el inodoro puede causar una presión excesiva en las venas rectales, lo que deriva en hemorroides, una afección dolorosa y molesta.
Además, el tiempo que pasamos en el baño utilizando el celular puede llevar a problemas musculoesqueléticos. La postura que adoptamos mientras estamos sentados durante largos periodos puede afectar la espalda baja, el cuello y los hombros. De acuerdo con especialistas, es fundamental evitar pasar más de 10 minutos sentado en el inodoro, ya que esto contribuye al desarrollo de problemas crónicos en la postura y en el sistema óseo-muscular.
Dado que la mayoría de las personas seguirán utilizando su teléfono en diversos lugares, incluidos los baños, es crucial mantener una correcta higiene del dispositivo. Las autoridades de salud, como la Comisión Federal de Comunicaciones de EE.UU., recomiendan higienizar el celular de manera regular para prevenir la acumulación de bacterias peligrosas.
La mejor manera de limpiar el celular es utilizando un paño de microfibra humedecido con agua tibia y jabón, o con productos diseñados específicamente para la limpieza de dispositivos electrónicos. También es útil emplear una solución compuesta de 60% de agua y 40% de alcohol isopropílico, que puede aplicarse con un paño suave. No olvides apagar el dispositivo antes de realizar la limpieza, y evitar que entre humedad en los puertos del teléfono.
