La guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás provoca una "devastación" económica de una "magnitud asombrosa" en la Franja de Gaza y, a su vez, en Cisjordania, condenó la ONU en un informe publicado este jueves.
"En todo el Territorio Palestino Ocupado se han interrumpido o diezmado los procesos de producción, han desaparecido las fuentes de ingresos, se ha intensificado y expandido la pobreza, se han erradicado barrios enteros y se han arruinado comunidades y ciudades", subrayó el informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (CNUCED).
"La operación militar ha provocado una crisis humanitarias, ambiental y social sin precedentes y transformado la región, donde la situación de subdesarrollo se ha tornado en una de devastación".
La guerra entre Israel y Hamás se desató el 7 de octubre, cuando milicianos islamistas mataron a 1.205 personas en el sur de Israel, en su mayoría civiles, según un balance de la AFP basado en datos oficiales israelíes.
También secuestraron a 251 personas, de las cuales 97 continúan cautivas en Gaza, incluidas 33 que los militares israelíes declararon muertas.
En respuesta, Israel lanzó una ofensiva que ya dejó más de 41.000 muertos en Gaza, según el Ministerio de Salud del territorio, gobernado por Hamás desde 2007.
Además del devastador balance humano, la guerra dejó una situación económica catastrófica en el territorio palestino.
Los autores del informe creen que el Producto Interior Bruto (PIB) de Gaza "se contrajo un 81%" en el último trimestre de 2023, lo que se tradujo en una contracción del 22% en el conjunto del año.
"Mientras la operación militar proseguía hasta mayo de 2024, la actividad económica en Gaza cayó a menos del 20 % del nivel de 2022", subrayó el informe de la CNUCED, que basa sus cálculos en cifras trimestrales de la oficina central de estadística palestina.
A principios de 2024, entre el 80 y el 96% de los bienes agrícolas de Gaza -- incluidos los sistemas de riego, las explotaciones ganaderas, los huertos, la maquinaria y las instalaciones de almacenamiento -- "fueron diezmados", señaló la CNUCED.
Esta situación, subrayó, agravó los ya elevados niveles de "inseguridad alimentaria".
Las destrucciones también afectaron duramente al sector privado, ya que "a principios de 2024, el 82 % de las empresas privadas de Gaza habían resultado dañadas o totalmente destruidas", añadió el informe.
El ataque de Hamás y las represalias que le siguieron avivaron también las tensiones en Cisjordania ocupada, donde se produjo un declive económico "tan rápido como alarmante".
Las fuerzas israelíes y los colonos mataron al menos a 664 palestinos en este territorio desde el 7 de octubre, según el Ministerio de Salud palestino.
Al menos 24 israelíes, incluidos soldados, murieron en ataques palestinos u operaciones militares en el mismo periodo, según datos oficiales israelíes.
Aunque Cisjordania registró un crecimiento del 4% en los nueve primeros meses del año pasado, este optimismo se vio "bruscamente truncado por una contracción sin precedentes del 19% en el cuarto trimestre, que provocó una caída sustancial del nivel de vida y de los ingresos de los hogares".
La expansión de los asentamientos ilegales, la confiscación de tierras, la demolición de estructuras palestinas, el aumento de la violencia de los colonos y el creciente número de puestos de control tuvieron un efecto nocivo en la actividad económica.
Incluso Jerusalén-Este se vio duramente afectada. El informe afirma que "el 80% de los negocios de la Ciudad Vieja" cesaron parcialmente o completamente sus actividades.
Casi todas las empresas del territorio registraron una caída de la actividad, y el 42,1% una reducción de su plantilla.
La tasa de desempleo pasó del 12,9% antes del conflicto al 32%, "erosionando gravemente la resistencia económica de los hogares palestinos y exacerbando las dificultades sociales", denunció el informe.
En Gaza, dos tercios de los empleos que existían antes de la guerra desaparecieron.
La pobreza estaba muy extendida antes del conflicto, pero hoy "afecta a casi toda la población de Gaza y aumenta rápidamente en Cisjordania", subrayó la CNUCED.