El debate fue seguido por casi 16 millones de personas más que el de junio, tras el que Biden abandonó la carrera presidencial, debido a un notable aumento de espectadores jóvenes y de mediana edad
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Un total de 67,1 millones de personas vieron el debate presidencial entre Kamala Harris y Donald Trump, lo que supone un aumento del 31% respecto al debate de junio entre Trump y el presidente de EEUU, Joe Biden, que acabó provocando el abandono del presidente de la carrera para 2024.
El debate estuvo dirigido por ABC News, pero se emitió en 17 cadenas diferentes, según la empresa Nielsen. El debate Trump-Biden de junio fue visto por 51,3 millones de personas.
El recuento del martes no alcanzó el récord de audiencia para un debate presidencial, cuando 84 millones de personas vieron el primer cara a cara entre Trump y Hillary Clinton en 2016. El primer debate entre Biden y Trump en 2020 alcanzó los 73,1 millones de personas.
Hubo un notable aumento de espectadores más jóvenes y de mediana edad, con un 53% más de adultos de 18 a 49 años sintonizando para ver a Harris debatir con Trump que para ver a Biden hacer lo mismo, según datos de Nielsen.
Entre los telespectadores de las cadenas de cable, el mayor número se registró en Fox News, con 9,1 millones de personas que sintonizaron la cadena conocida por su proximidad a Trump.
En general, se consideró que Harris había ganado el debate. Una encuesta flash de CNN entre los espectadores del debate mostró un 63% frente a un 37% de que Harris lo había hecho mejor. Antes del debate, esos votantes estaban divididos al 50% sobre quién ganaría. De los espectadores que apoyaban a Harris encuestados por CNN, el 96% dijo que ella había hecho un mejor debate, mientras que el 69% de los espectadores que apoyaban a Trump así lo afirmaron.
La campaña de Trump se atribuyó públicamente la victoria, pero algunos de sus colaboradores reconocieron en privado que era poco probable que convenciera a algún votante indeciso para que se decantara por él, según dijeron a The Guardian personas familiarizadas con el asunto.
La audiencia sitúa el debate aproximadamente entre los finales de las series Seinfeld (76,3 millones) y Friends (52,5 millones).
Minutos después de que terminara, Taylor Swift apoyó la candidatura de Harris-Walz ante sus 283 millones de seguidores de Instagram en un post que incluía un enlace al sitio web gubernamental de registro de votantes Vote.gov.
El sitio recibió casi 338.000 visitas nuevas en las horas siguientes, según informó un portavoz de la Administración de Servicios Generales a MSNBC.
Es probable que el apoyo de Swift tenga más influencia entre los estadounidenses menores de 35 años, ya que alrededor del 30% de ese grupo afirma que es más probable que vote a alguien a quien Swift apoye, según una encuesta realizada para Newsweek. Según el sondeo, un 18% de los votantes se declara “más propenso” o “significativamente más propenso” a votar por un candidato apoyado por Swift, mientras que un 17% se declara meno propenso.
No hay programados otros debates entre los dos candidatos presidenciales, aunque la campaña de Harris ha pedido uno, y Fox News Channel ha ofrecido públicamente alternativas. La CBS acogerá un debate vicepresidencial entre Tim Walz y JD Vance el 1 de octubre.
Las apuestas del debate del martes eran altas, no sólo por la inminencia de las elecciones, sino porque el último debate presidencial desencadenó una serie de acontecimientos que desembocaron en la retirada de Biden de la carrera.
Mientras que la CNN optó por no corregir ningún error de los candidatos durante el debate de Trump con Biden en junio, la ABC cuestionó en cambio las declaraciones que Trump hizo sobre el aborto, la inmigración, las elecciones de 2020 y los delitos violentos.
