El eurodiputado de Vox, Herman Tertsch , ha denunciado en un tweet que la «dictadura» de Nicolás Maduro, con la colaboración activa del gobierno de Pedro Sánchez, ha orquestado una campaña de «terror» para forzar la salida del líder opositor venezolano Edmundo González del país , al que Vox considera el legítimo presidente electo de Venezuela. Tertsch ha señalado que la «situación brutal» vivida en la embajada de Argentina en Caracas, donde se encontraba refugiado González, fue el «resultado de un plan conjunto entre Venezuela y España para impedir el reconocimiento de las elecciones y consolidar el poder de Maduro. «Había que crear un ambiente de terror ... para que se fuera al exilio no el usurpador asesino y dictador, sino el ganador de las elecciones, Edmundo González Urrutia», se puede leer en el tweet de Tertsch, que también ha compartido en sus redes el líder de la formación, Santiago Abascal. Vox acusa al Gobierno español de ser cómplice directo en este proceso. El partido considera que tanto Pedro Sánchez como como el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, han actuado en favor de Maduro para desestabilizar la verdadera oposición venezolana. Según Vox, este episodio es una muestra más de la cercanía entre los dos gobiernos y de los intereses ocultos que ambos comparten. Tertsch también advirtió que esta maniobra no solo busca descabezar la oposición venezolana, sino imponer la resignación y la permanencia de regímenes autoritarios tanto en Venezuela como en España. «Se trata de aplastar toda ilusión e imponer la resignación... Maduro como Sánchez, van a seguir pase lo que pase», afirmó el eurodiputado. Vox ha pedido una respuesta firme de la comunidad internacional y ha reiterado su rechazo a las políticas del gobierno de Sánchez, al que acusa de socavar la libertad y la democracia en América Latina en connivencia con «gobiernos dictatoriales» como el de Maduro. Ha señalado, además, a Josep Borrell , alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y a Ursula vonder Leyen , presidenta de la Comisión Europea, como «cómplices» que tienen la intención de descabezar al pueblo venezolano «de sus líderes en la esperanza».
