El papa Francisco lanzó un mensaje para todos los cristianos que buscan llegar la salvación y quieran encontrarse con Jesús. El líder del Vaticano señaló que hay dos grupos de personas de la Iglesia católica que verán primero a Cristo en el cielo.
Durante su encuentro con los asistentes de las realidades caritativas en la sede de la Conferencia Episcopal de Indonesia y en su 45° viaje misionero, el sumo pontífice remarcó que se trata de cristianos que son "pequeñas estrellas brillantes en el cielo de este archipiélago".
El líder de la santa sede inauguró su viaje por el sudeste asiático con un discurso que incluyó una exhortación conjunta a todos los fieles del mundo, aunque destacó a dos grupos en particular: los pobres y los enfermos.
"Afrontar las dificultades juntos, dando lo mejor de nosotros y aportando cada uno nuestra contribución única, nos enriquece y nos ayuda a descubrir día a día cuánto vale nuestro estar juntos, en el mundo, en la Iglesia, en la familia", inició.
El líder del Vaticano se acercó a cientos de personas vulnerables que reciben ayuda de organizaciones caritativas en Indonesia. El excardenal Jorge Bergoglio agradeció su presencia y destacó su importancia para el catolicismo.
El papa Francisco indicó quiénes serán los primeros en llegarl al cielo.
"Ustedes que son pequeñas estrellas brillantes en el cielo de este archipiélago. Son los miembros más valiosos de esta Iglesia y sus tesoros como enseñó el diácono mártir San Lorenzo desde los primeros siglos del cristianismo, puntualizó.
El papa Francisco indicó que las condiciones de las personas no deben ser vistas con crueldad: "Dios ha creado a los seres humanos con capacidades únicas para enriquecer la diversidad de nuestro mundo".
"Todos nos necesitamos unos a otros y esto no es malo. De hecho, nos ayuda a comprender cada vez mejor que el amor es lo más importante en nuestra existencia y a darnos cuenta de cuántas personas buenas hay a nuestro alrededor", añadió.
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El líder del Vaticano agradeció la invitación y sus pares, que representan a la iglesia en Indonesia, indicaron que "Jesús es el faro" de su gran comunidad.
"Es muy hermoso que los obispos indonesios hayan elegido celebrar con ustedes el centenario de su conferencia nacional. Gracias por esta elección. Gracias, presidente. Se ve que su espíritu cartujo nos ayuda a hacer estas cosas", cerró.
El líder del Vaticano celebró el encuentro con jóvenes vulnerables y agradeció a los obispos de Indonesia.
"En aquel tiempo, Jesús estaba a orillas del lago de Genesaret y la gente se agolpaba en torno suyo para oír la palabra de Dios. Jesús vio dos barcas que estaban junto a la orilla. Los pescadores habían desembarcado y estaban lavando las redes. Subió Jesús a una de las barcas, la de Simón, le pidió que la alejara un poco de tierra, y sentado en la barca, enseñaba a la multitud.Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: "Lleva la barca mar adentro y echen sus redes para pescar". Simón replicó: 'Maestro, hemos trabajado toda la noche y no hemos pescado nada; pero, confiado en tu palabra echaré las redes'. Así lo hizo y cogieron tal cantidad de pescados, que las redes se rompían. Entonces hicieron señas a sus compañeros, que estaban en la otra barca, para que vinieran a ayudarlos. Vinieron ellos y llenaron tanto las dos barcas, que casi se hundían.Al ver esto, Simón Pedro se arrojó a los pies de Jesús y le dijo: '¡Apártate de mí, Señor, porque soy un pecador!' Porque tanto él como sus compañeros estaban llenos de asombro, al ver la pesca que habían conseguido. Lo mismo les pasaba a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón.Entonces Jesús le dijo a Simón: 'No temas; desde ahora serás pescador de hombres'. Luego llevaron las barcas a tierra, y dejándolo todo, lo siguieron".
