El centrocampista del Betis Isco Alarcón, que fue intervenido el pasado mayo de una rotura en el peroné izquierdo, será operado de nuevo en las próximas horas al haber detectado los médicos del equipo bético una falta de consolidación en el callo de dicha fractura, anunció este miércoles el club.
El malagueño, que se lesionó el 16 de mayo en un partido de LaLiga en el campo de Las Palmas tras un golpe en el gemelo, fue operado cuatro días después de una "fractura diafisaria del peroné izquierdo" y, con el trabajo de recuperación hecho desde entonces, estaba en el proceso de puesta a punto para poder reaparecer, aunque con esta "complicación" su baja se prolongará más tiempo.
"Tras las pruebas de control realizadas a Isco Alarcón estos días, se ha detectado una falta de consolidación en el callo de fractura y la formación de puentes óseos sólidos. Ante el riesgo de un déficit de consolidación completa en los próximos meses, tras valoración por parte de servicios médicos del club en conjunto con otros especialistas externos con experiencia en este tipo de procesos, se ha decidido revisar el foco de fractura quirúrgicamente para intentar revitalizar el mismo. El pronóstico queda reservado a la evolución postquirúrgica", rezaba el comunicado completo. En principio, Isco estará de baja entre tres y cuatro meses.