Dieciséis entidades sociales buscan puertos en Catalunya, Murcia, Baleares o Sicilia para preparar los barcos de rescate de migrantes tras reclamar la Generalitat Valenciaan las tasas de los últimos cuatro años al barco 'Aita Mari' e iniciar otros expedientes de cobro retroactivo a naves humanitarias
Los puertos de Borriana, Benicarló, Dénia o Vinaròs han sido durante años una base segura para los barcos de salvamento de organizaciones humanitarias que han rescatado a miles de personas de morir ahogadas en el Mediterráneo. Allí, estas embarcaciones y sus tripulaciones han recibido asistencia, comida o han podido reparar sus motores, además de disfrutar de periodos de descanso tras meses en alta mar. La Comunitat Valenciana se había convertido en una tierra de acogida y en un puerto seguro y de confianza, como siempre ha estado grabado a fuego en el código marítimo milenario. Pero esta imagen internacional marca del pueblo valenciano podría quedar empañada por una gestión administrativa.
L'Aurora Grup de Suport, entidad creada en el puerto de Borriana desde los movimientos sociales, políticos y culturales de base, está estudiando diferentes opciones para continuar “desarrollando con garantías” su actividad de apoyo a la flota de rescate civil humanitario fuera del territorio valenciano. El anuncio de este colectivo que engloba a 16 entidades llega después de que el Gobierno de Carlos Mazón haya reclamado al barco de salvamento Aita Mari las tasas portuarias de los últimos cuatro años y de las que habían sido eximidas este tipo de embarcaciones por el anterior Consell de izquierdas. “No es que no queramos pagar, queremos seguridad jurídica para poder hacer nuestro trabajo. No nos pueden pedir retroactividad de unos costes que no estaban previstos”, ha explicado a elDiario.es Vicent Aleixandre, cofundador de la entidad, quien revela que la Generalitat tiene iniciados otros expedientes contra barcos humanitarios que atracaron en la Comunitat Valenciana.
La alemana Tanja Seidel, nueva Coordinadora de Operativa y Desarrollo Internacional de L’Aurora, lamenta los “enormes perjuicios con resultado de pérdida de vidas humanas que supondrá el cobro retroactivo de tasas portuarias a las entidades humanitarias por parte del actual gobierno valenciano”. “No nos sorprende este nuevo ataque encabezado por la extrema derecha, lo estábamos esperando. Mantenemos esperanzas en que partidos políticos democráticos y con valores humanitarios den una solución rápida a esta situación”, ha añadido Tanja Seidel. Desde l’Aurora Grup de Suport reclaman responsabilidad y humanidad a los representantes públicos. “¿Qué tipo de fiabilidad y proyección internacional muestra una institución como el Gobierno valenciano al llegar a un compromiso de supresión de tasas para luego aplicarlas con carácter retroactivo?. Esto es demencial y contraviene todo sentido de humanidad”, han añadido.
Desde l’Aurora lamentan tener que plantearse abandonar el territorio valenciano y no tan solo por motivos humanitarios, “también por la falta de visión de gobernantes de todo el espectro político”. “La llegada de estos barcos supone prosperidad, generación de empleo y nuevos horizontes para las trabajadoras de nuestras poblaciones. Es lamentable que un puerto como el de Borriana construido con el consenso y esfuerzo de nuestros antepasados pierda esta oportunidad única de seguir siendo un referente”, argumenta Vicent Aleixandre.
Desde la entidad vislumbran “la pérdida de redes creadas con cariño todos estos años con proveedores, productores locales, pequeñas empresas, hostelería, servicios y profesionales, algo que también genera impacto en la economía local”. “La equipación de barcos en tiempo récord supone una compleja coreografía que comienza con la acción de las empresas responsables de los diferentes varaderos y termina con el avituallamiento completo de los buques. En este proceso participan proveedores locales de alimentos, empresas de alquiler de vehículos, transporte, tratamiento de residuos, repostaje de combustibles y especialistas navales por destacar algunos. Sin dejar de lado alojamiento, hostelería y prestación de todo tipo de servicios, que también se benefician positivamente de la presencia de centenares de voluntarios de esta flota en nuestro territorio”, explican las mismas fuentes.
L’Aurora Grup de Suport trabaja desde hace meses en la localización y elección de nuevos puertos en el sur de Cataluña, Murcia, Baleares y Sicilia donde poder reubicar las acciones operativas, atendiendo a criterios técnicos, de ubicación y de servicios. Marco Antonio Martínez, coordinador de este departamento, cuenta con una dilatada trayectoria en la posición de capitán al frente de operaciones de rescate a bordo de embarcaciones como Aita Mari, Open Arms, Louise Michel o Rise Above, donde ha tenido la oportunidad de rescatar centenares de personas en el mar.
La entidad ha iniciado en las últimas semanas una campaña de denuncia y movilización con la que busca alianzas con la ciudadanía y organizaciones valencianas y de toda Europa con el objetivo de hacer reflexionar al gobierno valenciano. El objetivo es reclamar la condonación efectiva de las tasas portuarias a todas las entidades sin ánimo de lucro afectadas. Para empezar se sumará a la convocatoria organizada por la entidad SMH el viernes 6 de septiembre a las 11 horas frente al Palau de la Generalitat Valenciana.
El colectivo l'Aurora empezó su misión de apoyo humanitario en 2015 y cuenta con una operativa constante en los puertos de Borriana y Vinaròs. También ha llevado a cabo acciones en los puertos de Dénia, Sagunt y Benicarló. Desde estos enclaves ha apoyado a más de una veintena de entidades humanitarias procedentes de toda Europa, convirtiendo los puertos de la Comunidad Valenciana en un referente internacional de solidaridad y autoorganización por el respeto efectivo de los derechos humanos. En este período han asistido a 16 embarcaciones diferentes que han preparado 72 rotaciones de rescate en el Mediterráneo.