El club de la localidad lucense publicó un comunicado ofreciendo apoyo y pidiendo colaboración a los vecinos para recibir a 120 personas procedentes, sobre todo, de Malí, un país en guerra
Rueda reconoce que la llegada de migrantes no desborda Galicia tras calificarla de “aluvión”
Balbino Martínez es el presidente de la Sociedad Deportiva Monterroso, el equipo de fútbol de este pequeño municipio lucense (3.600 habitantes). Pero estos días atiende cuestiones que trascienden lo deportivo porque el club se está movilizando para acoger a las 120 personas migrantes que acaban de llegar al pueblo tras haber huido de situaciones de guerra y pobreza en sus países de origen. La mayoría vienen de Malí, un país sumido desde hace más de una década en un conflicto que se ha agravado en los últimos dos años. Martínez explica que, con las noticias sobre el traslado de este grupo de hombres, empezaron a circular bulos entre los vecinos. Y pensó que había que reaccionar: “Hablé con la directiva y dijimos: 'Tenemos que dar ejemplo aquí. Vamos a sacar un comunicado porque, al final, todas las familias del pueblo tienen alguna relación con la S.D. Monterroso'”.
El texto, publicado en su perfil de Instagram el viernes –el día en el que llegó la segunda parte del grupo de 120 migrantes–, traslada la disposición del equipo a colaborar y anima a los vecinos a implicarse también. “Recordamos que nadie huye de su hogar por elección, sino por un motivo de supervivencia y mejorar las condiciones de vida. No es cuestión de caridad, sino de posibilitar oportunidades”, dice el comunicado oficial, firmado por el presidente del equipo. Los datos de la Delegación del Gobierno en Galicia confirman que la mayor parte huyeron de la guerra y llegaron en cayuco a Canarias. Está previsto que se queden en Monterroso entre dos y cuatro meses, alojados en el hotel Río Ulla.
El presidente de la S.D. Monterroso ve en el club un elemento aglutinador y que llega a todos los habitantes porque, de un modo o de otro, todas las familias están en contacto con él. El objetivo era utilizar esa ventaja “para concienciar y, obviamente, ayudar”. Él mismo se puso en contacto con la ONG Rescate, que está acompañando a estos migrantes en Monterroso, para preguntar cómo podían echar una mano. En el comunicado piden donaciones de ropa y adelantan que los migrantes podrán acceder a todos los partidos de forma gratuita y que el S.D. Monterroso compartirá las instalaciones municipales para lo que sea necesario y promoverá actividades de ocio.
El pasado fin de semana invitaron a los migrantes a ir a un torneo –que ganó el equipo visitante, el Lalín– en el campo de fútbol. Un grupo de ellos fue y Martínez cuenta que se tomó un café y habló con ellos: “Lo que quieren es trabajar y aprender castellano. Su objetivo es integrarse, se les ve. Recalcaban que no querían tener problemas con nadie y que les molestaban algunas miradas de algunas personas”.
El presidente del club añade que van a tratar de reunir también material deportivo por si alguno de estos hombres quiere jugar al fútbol también. La idea es ofrecerles alternativas de ocio y también que eso contribuya a normalizar su presencia en el pueblo. Todos los integrantes del equipo apoyan la postura y varios se han presentado voluntarios para colaborar. Martínez señala que también hay vecinos en el pueblo que les han dado la enhorabuena por su iniciativa.
La ONG que está acompañando a estos 120 migrantes, asegura que no ha habido incidencias en la acogida y que, de hecho, se han encontrado con que muchos vecinos han ofrecido su colaboración e incluso han propuesto enseñar sus oficios a los recién llegados. También se está organizando una fiesta de bienvenida para los próximos días.
La actitud del equipo de fútbol contrasta con la del Gobierno local, dirigido por Eloy Pérez (PP), que dijo, a mediados de agosto, que le parecía indignante que el Gobierno central quisiese “imponer” una situación que llevaba días “generando alarma social”. El número de personas es, a su juicio, “desproporcionado” porque equivale al 10% de los habitantes del núcleo urbano. Reclamó más claridad en la información y que se aclaren los criterios. Localidades más grandes, como Monforte de Lemos, recibieron un número menor, protestó.
Las críticas van en la misma línea que las del presidente de la Xunta y del PPdeG, Alfonso Rueda, que, aunque habló de “aluvión sin criterio”, admitió que Galicia no está desbordada con la llegada de migrantes. Las quejas por la gestión del Gobierno central se han mantenido en las últimas semanas. La más reciente es que, entre las 800 personas migrantes que han llegado a Galicia, hay 15 menores. La conselleira de Política Social, Fabiola García, ha indicado que se incluirán al sistema de protección de la comunidad y que se trabajará con la Fiscalía para hacerles pruebas de edad.