El sol cae de plano en la carpa habilitada por la Federación Española para la entrevista con Mikel Oyarzabal. El futbolista que consiguió el gol del triunfo ante Inglaterra en la final de la Eurocopa aparenta la misma tranquilidad que demostró al rematar aquel pase de Cucurella. No es estridente, ni gesticula. «Soy serio hasta que cojo confianza», admite en la charla que mantuvo con ABC antes de los dos partidos internacionales de la selección española ante Serbia y Suiza, valederos para la Nations League. -¿Siente que ha cambiado algo en su vida después de ese gol? -Bueno, a mí personalmente no me ha cambiado nada, yo sigo siendo el mismo, no he cambiado y creo que no voy a cambiar, sigo siendo el mismo que cuando tenía 15 o 16 años. Me gusta estar con mi familia, mis amigos de toda la vida y creo que eso no va a cambiar, pase lo que pase. -¿Siente que no haber cambiado nada le define? -Creo que los que estamos allí en Guipúzcoa, los vascos en general, pues somos un poquito más reservados y siempre nos cuesta más salir de nuestra zona de confort y creo que nos caracteriza un poco eso. -¿Es serio entonces? -Bueno, creo que hasta que ganó confianza, sí que puedo parecer un poco serio, pero luego cuando cuando ya tengo confianza con mis amigos, con mi gente cercana, creo que soy diferente. -Usted es el gol de la Eurocopa. ¿Cómo fue ese momento cumbre? -Pues te sale el instinto cuando veo el balón que sale de Cucurella, yo tiro el desmarque porque veo que voy a llegar ajustado con el defensor y si la toca va a ser de primeras. Me lanzo al suelo sin pensar mucho, no sé dónde estoy exactamente, tampoco dónde está el rival me tiro a por el balón y por suerte salió todo bien. -Se queda como esperando, mirando, sin reaccionar… ¿Pensó que era fuera de juego? -Al principio miro al linier, veo que no levanta el banderín, pero no corre. Y eso que crea la duda. Cuando empieza a correr ya hacia el centro del campo, es cuando yo empiezo a celebrar. Tuve la duda de si era o no era fuera de juego y bueno, hasta que el árbitro me dijo que estaba todo bien, pues estaba un poco en duda. -¿Cree en el destino porque le toca vivir un privilegio así o cree simplemente que es un delantero y lo normal es que marque? -Bueno, no sé si es el destino, los cinco jugadores que estábamos de la Real Sociedad en aquel momento nos solíamos quedar muchas veces después de comer o después de cenar charlando en la mesa. Y los días anteriores a la final pues estábamos hablando que nos iba a tocar a alguno de nosotros ser importante en la final. Creíamos que en algún momento nos iba a tocar y bueno, pues no sé si es destino o no, llámalo como quieras, pero me tocó a mí. -En la memoria está el gol de Marcelino, el de Fernando Torres, la parada de Casillas, el gol de Iniesta. Usted está ahí, el gol de Oyarzabal… -Sé que es un privilegio. Seguramente cuando me toque retirarme, pues le daré más importancia y más valor, ahora estoy en la rueda de volver otro año a competir, ha empezado una temporada nueva, tienes otra vez dos partidos para disputar otra vez otro título y creo que que no le das quizás la importancia o el valor que tiene. -Se le puede considerar ya un veterano de la selección porque lleva ya un tiempo. -Sí es verdad que llevo unos cuantos años aquí con el parón de por medio que tuve por la lesión, pero es verdad que llevo muchos años, muchos partidos y nada, estoy contento por esa parte, porque considero también que soy una persona que puede ayudar al grupo. -¿Usted participa de la teoría de Luis de la Fuente, que prefiere llamar buenas personas a la selección? -Yo estoy de acuerdo porque al final el mes y medio que vivimos en la Eurocopa fue un periodo muy bonito en el que todo el mundo estaba cómodo. Si no tienes un buen grupo, ya no solo de los futbolistas, sino todo el entorno de gente que está trabajando aquí para ayudarnos a nosotros, pues no consigues nada. En ese aspecto nosotros estamos más que sobrados. -Antes de la Eurocopa no interesaba mucho la selección. Ahora es al contrario. ¿Ese todo o nada de nuestro país le gusta? -Sabemos cómo es la gente y sabemos cómo es el deporte y el fútbol. Al final todo es muy resultadista y cuando las cosas van mal, le cuesta mucho más a la gente y cuando las cosas van bien, pues obviamente es más fácil. Es parte de la naturaleza del fútbol y nos tenemos que acostumbrar. En el fútbol no se vive del pasado, no se vive de lo que había antes y se vive del presente, de si ganas o no ganas mañana. Rara vez va a cambiar el fútbol en eso. -¿Es verdad que se le da bien la cocina? -Me gusta cocinar cuando tengo tiempo y tal, pero un gran especialista tampoco soy. No se me da mal. -¿Cuál es su plato estrella? -No sé, eso tendrías que preguntar a la gente con la que estoy, para la que cocino y que te digan, en general es algo que me gusta. -Estudió empresariales. ¿Aplica sus conocimientos universitarios a su vida profesional? -No lo he aplicado al cien por cien, todo lo que me gustaría, pero obviamente creo que ayuda el hecho de tener unos estudios, de saber algo relacionado con la gestión del dinero, de qué hacer con ello. Creo que algo he aprendido y me gusta también estar al tanto. -¿Sigue la bolsa, el desarrollo de las empresas y demás? -No al cien por cien, me gusta estar al día y saber en lo que puedo llegar a invertir, en lo que puedo llegar a meter mi dinero y tener el asunto controlado todo. -¿Ha invertido en algún sector concreto? -No, en general. -Sus representantes son sus padres, eso no es muy normal. -No, mis padres han trabajado y han sabido lidiar con personas, tratar y negociar con ellas y creo que ninguna persona va a defender mis intereses mejor que mis padres, que son los que más me quieren. Siempre he estado muy tranquilo por esa parte. -¿A qué se han dedicado sus padres? -Mi madre sigue estando en la banca y mi padre era comercial. -Siempre se dice que los futbolistas viven en una burbuja. Su mujer es médico en un hospital de Pamplona. ¿Conocer los problemas de salud de la gente le acerca a la realidad? -No solamente por el hecho de que ella trabaje, sino que yo hablo con mis amigos, salgo a la calle y por mucho que yo esté en otra en otra cosa porque sabemos cómo es el tema del fútbol, pero al final el simple hecho de hablar con tus amigos, de saber cuáles son sus problemas, te hace ver la realidad de la gente. También los futbolistas tenemos los nuestros aunque sean menores, aunque sean de otro tipo y como tú dices el hecho de ver también a mi mujer en su día a día, te hace comprender las situaciones difíciles. -¿Tiene amigos en paro? -Todos tenemos algún amigo en paro, gente que no llega como debe a final de mes. Y no por ser futbolistas somos una excepción. Al final eso lo tenemos todos igual y obviamente me gustaría que mis amigos y conocidos estuvieran en situaciones mejores. Mezclamos bien y van a ser mis amigos toda la vida. -No se ha movido de la Real Sociedad. Futbolista de un solo club. ¿Por qué? -Estoy feliz allí, me han ayudado desde muy pequeñito a crecer ya no solo como futbolista también como persona. Yo quiero estar muchos años en el club, pero quiero en esos años ser importante y conseguir cosas, que el club también crezca y de la mano del club crecer todos juntos, que es lo que se quiere.
