Dos lanchas en las que siete hombres transportaban casi 1.000 litros de combustible fueron interceptadas por oficiales del Servicio Nacional de Guardacostas (SNG) en dos operativos distintos, realizados el pasado viernes y en la madrugada de este sábado, según informó el Ministerio de Seguridad Pública (MSP) esta noche.
El primer operativo se llevó a cabo el viernes 30 de agosto, a 148 kilómetros de Quepos, en el Pacífico central, donde se interceptó una lancha rápida de 22 pies de largo, sin nombre, bandera ni matrícula.
A bordo de la nave, los oficiales hallaron cinco estañones y dos pichingas con 660 litros de gasolina. La embarcación fue trasladada a Quepos y, tras descartarse la presencia de drogas, tanto la nave como el combustible quedaron a disposición de la Fiscalía de la localidad.
El capitán de la embarcación, un nicaragüense de apellido Sánchez, de 24 años, se encontraba en condición migratoria regular en el país. Los demás tripulantes fueron identificados como un costarricense de apellidos Quirós, de 54 años, y dos colombianos, ambos de apellido Sierra, quienes, según la Policía de Migración, están en condición irregular.
La segunda intervención ocurrió la madrugada de este sábado, a las 4:13 a. m., en la bocana de Cieneguita, Limón. Allí, los oficiales del SNG divisaron una embarcación cuyos tripulantes, al percatarse de la presencia policial, intentaron huir.
Las autoridades persiguieron la nave, desde la cual los ocupantes arrojaron varios recipientes con combustible al mar mientras realizaban maniobras evasivas peligrosas. Sin embargo, al intentar ingresar a la bocana de Moín, la nave encalló y sus tripulantes fueron detenidos. Se trata de tres costarricenses identificados con los apellidos Estrada, Reyes y Ruiz.
La embarcación es una lancha de pesca artesanal de 32 pies con matrícula de Limón, propulsada por un motor de 200 caballos de fuerza, la cual, por orden de la Fiscalía de Limón, fue decomisada junto con los 290 litros de gasolina que llevaba a bordo.
