El Monte Everest ha reinado durante décadas como la montaña más alta de la Tierra, con sus imponentes 8.848 metros sobre el nivel del mar, y atrajo a alpinistas de todo el mundo que buscan conquistar su desafiante cumbre. Sin embargo, una montaña ubicada en un enorme país sacudió esta concepción al superarlo ampliamente en altura cuando se mide desde su base subacuática. Este fenómeno natural reabre el debate sobre cuál es verdaderamente la montaña más alta del planeta.
Este se erige como un coloso aún mayor que el Everest cuando se considera su altura total desde el fondo del océano hasta su cumbre. Con una altitud que alcanza los 10.205 metros, este monte es la verdadera cima del mundo, y supera al Everest en más de 1.500 metros. Este hecho nos lleva a replantearnos qué parámetros utilizamos para definir la "montaña más alta" y a reconocer la importancia de considerar la estructura geológica completa de estas maravillas naturales.
Estados Unidos es la potencia mundial que alberga la montaña más alta de la Tierra si se mide desde su base. El Mauna Kea, ubicado en el archipiélago de Hawái, emerge desde las profundidades del océano Pacífico, tras alcanzar una altura total de 10.205 metros. Este volcán inactivo fue moldeado por millones de años de actividad volcánica, y creó una de las estructuras más impresionantes del planeta.
A pesar de que su cumbre se sitúa a 4.205 metros sobre el nivel del mar, es su base submarina lo que lo convierte en la montaña más alta del mundo. Este hecho lo coloca por encima del Monte Everest, que ha sido tradicionalmente reconocido como la cima más elevada debido a su prominencia desde el nivel del mar. Sin embargo, cuando se considera la verdadera extensión vertical de estas montañas, el Mauna Kea supera al Everest en más de 1.500 metros, y redefinió los conceptos tradicionales de altura y grandiosidad en la Tierra.
A pesar de la imponente altura del Mauna Kea, el Monte Everest mantiene su estatus de récord Guinness como la montaña más alta del mundo debido a la convención internacional de medición desde el nivel del mar. Este criterio uniforme permite comparaciones directas entre las diferentes montañas del planeta, lo que ha consolidado al coloso asiático como la cumbre más alta.
El Everest es reconocido por su altitud, pero también por la icónica y desafiante ascensión que representa. Ubicado en la frontera entre China y Nepal, en Asia, este gigante fue el destino final para montañistas de todo el mundo que buscan superar sus límites físicos y mentales.
Además del Monte Everest y el Mauna Kea, el planeta alberga otras montañas impresionantes que destacan por su altura y majestuosidad:
Sí, desde la cima del Mauna Kea es posible observar la Vía Láctea con una claridad impresionante. Este lugar es reconocido como uno de los mejores del mundo para la observación astronómica debido a su altitud, cielos despejados y mínima contaminación lumínica. La cumbre del Mauna Kea ofrece condiciones atmosféricas excepcionales, lo que ha convertido a este volcán en un punto de referencia para astrónomos que buscan explorar los misterios del cosmos.