El Gobierno alemán anunció este viernes que ha vuelto a expulsar a criminales afganos a su país, una medida que no aplicaba desde agosto de 2021 y que afecta a "delincuentes convictos que no tenían derecho a permanecer en Alemania y contra los que se habían dictado órdenes de expulsión".
El anuncio, hecho público por Steffen Hebestereit, portavoz del Gobierno del canciller alemán Olaf Scholz, se produce apenas una semana después del atentado que dejó tres muertos en la ciudad de Solingen (oeste) y tras el cual el Ejecutivo ha presentado nuevas medidas para endurecer la política migratoria y de seguridad.
"Esta mañana, Alemania devolvió a nacionales afganos a su país de origen por primera vez desde agosto de 2021", indicó Hebestreit a través de un comunicado en el que el Gobierno de Scholz reiteró su "compromiso" para llevar a cabo repatriaciones como las anunciadas este viernes.
"El interés de Alemania por la seguridad prevalece claramente sobre el interés por proteger a delincuentes y personas peligrosas", señaló el comunicado del portavoz del Ejecutivo germano, que la víspera presentó un paquete de medidas con el que Berlín pretende endurecer las políticas de inmigración y seguridad.
Dicho paquete fue la reacción del Gobierno de Scholz al atentado con cuchillo que dejó tres muertos la semana pasada en Solingen perpetrado por un ciudadano sirio que hubiera debido ser deportado con anterioridad y que juró lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Hebestreit señaló al aludir en su comunicado a los inmigrantes afganos sobre los que pesan condenas y órdenes de expulsión que "en los últimos meses, el Gobierno Federal ha realizado grandes esfuerzos para reanudar los retornos en estos casos y ha apoyado a los Estados federados responsables a tal fin".
"Alemania ha pedido apoyo a socios regionales clave para facilitar la repatriación. El Gobierno Federal está muy agradecido por este apoyo", señaló el portavoz en su comunicado.