Kamala Harris ha mantenido el impulso que trajo a la contienda presidencial y lidera o empatada con el republicano Donald Trump en cada uno de los siete estados con mayores probabilidades de decidir la carrera.
La encuesta de Bloomberg News/Morning Consult —realizada en estados en disputa después de la Convención Nacional Demócrata de la semana pasada— encontró que la vicepresidenta ha reducido o revertido la ventaja de Trump en temas económicos clave y se ha establecido como más confiable que su rival para proteger las libertades personales.
Harris ahora tiene una ventaja de 2 puntos porcentuales entre los votantes registrados en los siete estados. Tiene una ventaja de 1 punto —un empate estadístico— entre los votantes probables, un grupo al que las campañas y los encuestadores comienzan a dirigir su atención a medida que se acerca el día de las elecciones. El margen de error estadístico es de 1 punto porcentual en los siete estados.
En comparación con su predecesor en la lista demócrata, el presidente Joe Biden, Harris ha abierto nuevas posibilidades de victoria en el Colegio Electoral al poner nuevamente en juego estados clave del Sun Belt como Georgia y Nevada.
En ningún otro lugar resulta más llamativo que en Carolina del Norte, donde Harris tiene ahora una ventaja de dos puntos. Ningún candidato presidencial demócrata ha ganado allí desde Barack Obama en 2008, y Trump llevaba una ventaja de diez puntos en abril.
La creciente fortuna de Harris en Carolina del Norte ha obligado a los republicanos a gastar más de 16 millones de dólares en anuncios televisivos allí apoyando a Trump en las últimas cinco semanas.
El estado más cercano es Arizona, donde los candidatos están empatados. En Wisconsin, Harris ahora tiene una ventaja estadísticamente significativa de 8 puntos.
La encuesta muestra que las percepciones de los votantes de los estados clave sobre la economía no han mejorado drásticamente desde que Harris asumió el liderazgo de la fórmula. Una mayoría de los encuestados todavía dice que estaban mejor con Trump.
Pero los votantes parecen menos proclives a responsabilizar a Harris de las inseguridades económicas que afectaron a Biden. Por un margen de 7 puntos, los votantes de los estados clave confían en Harris por encima de Trump para ayudar a la clase media. En varios factores económicos, Harris ha mermado la ventaja de Trump o incluso ha ganado terreno.
En lo que respecta a quiénes son los candidatos más confiables para gestionar los costos de la vivienda, Harris tiene una ventaja de 4 puntos sobre Trump. En ese tema, Biden recientemente tenía una desventaja de 6 puntos con respecto al republicano. Harris también ha superado a Trump en los temas de beneficios gubernamentales, aumentos salariales y deuda personal.
Y en el factor económico más importante de la elección, el aumento del costo de los bienes de uso diario, Harris ha reducido la ventaja de Trump en 11 puntos. Sin embargo, los votantes todavía confían mucho más en Trump en cuestiones como los precios de la gasolina y el desempeño del mercado de valores.
Incluso en áreas como la inmigración y el crimen —los dos temas que Trump y sus súper PAC alineados han empleado con mayor frecuencia en anuncios de ataque en estados clave— Harris ha socavado la ventaja de confianza que tenía Trump cuando su oponente era Biden.
El aborto sigue siendo un factor motivador para los votantes de Harris, ya que casi tres de cada cuatro demócratas de estados clave dicen que es “muy importante” para su voto. Y Harris ha ampliado su ventaja sobre Trump en ese tema, ya que el 55 por ciento de los votantes de estados clave dicen que confían en ella, en comparación con el 34 por ciento de Trump.
Harris también utilizó su convención para intentar recuperar conceptos como la libertad y el patriotismo, asociados durante mucho tiempo con el Partido Republicano, para los demócratas.
Por un margen de cinco puntos, los votantes de los estados clave confían más en ella que en Trump para proteger la libertad personal, una frase que los demócratas han usado para hablar de derechos reproductivos, matrimonio entre personas del mismo sexo y prohibición de libros. Aun así, por el mismo margen, los votantes de los estados clave eran más proclives a decir que consideran que Trump es patriótico.
Los candidatos presidenciales suelen obtener un pequeño aumento de apoyo después del espectáculo de sus convenciones, pero una serie extraordinaria de eventos este verano ha alterado los ritmos normales de las campañas modernas.
En el debate presidencial más temprano de la historia, celebrado en junio, Biden tuvo un desempeño tan pobre que se retiró bajo presión menos de un mes después. Trump sobrevivió a un intento de asesinato antes de su propia convención y disfrutaba de su mayor ventaja en las encuestas nacionales justo antes de que Harris entrara en la carrera, lo que trajo nuevo entusiasmo y una recaudación de fondos récord a la fórmula demócrata. En la semana de su convención del partido repleta de estrellas, su campaña dijo que recaudó 82 millones de dólares.
“Kamala Harris no tuvo un empujón en la convención porque lo tuvo al principio de su campaña. Su empujón fue el lanzamiento de su campaña”, dijo Eli Yokley, analista de política estadounidense de Morning Consult. “Lo que hemos visto desde que se presentó a la contienda es una cobertura positiva sustancial que llega a los votantes. El revuelo en torno a su campaña es muy positivo”.
Una señal de ese entusiasmo es el optimismo entre los demócratas sobre una victoria de Harris: la encuesta encontró que el 84 por ciento de los partidarios de Harris dicen que esperan que ella gane, en comparación con el 79 por ciento de los votantes de Trump que predicen lo mismo para su candidata.
Trump ha afirmado en repetidas ocasiones que lidera todas o la mayoría de las encuestas, incluso cuando la tendencia ha cambiado en las encuestas nacionales. Pero su campaña ha argumentado cada vez más que los encuestadores se han equivocado con respecto a Trump en el pasado y volverán a equivocarse.
Cuando finalizó la convención demócrata la semana pasada, el encuestador de Trump Tony Fabrizio predijo que Harris obtendría un “impulso” temporal en las encuestas, impulsado en gran medida por la “cobertura aduladora de Harris y la cobertura negativa del expresidente Trump”.
“Sin duda hemos disfrutado de un asiento en primera fila de la ‘luna de miel’”, escribió Fabrizio en un memorando. “De hecho, los medios de comunicación decidieron prolongar la luna de miel durante más de cuatro semanas”.
En la encuesta de Bloomberg News/Morning Consult, los votantes de los estados clave tenían más probabilidades de informar haber escuchado noticias positivas sobre Harris durante su convención. Alrededor de la mitad de los votantes dijo que escuchó noticias mayoritariamente positivas sobre Harris la semana pasada, en comparación con el 39 por ciento que dijo que las noticias fueron mayoritariamente negativas. Esa diferencia, que los especialistas en marketing llaman “puntuación de popularidad”, es positiva en 11 puntos para Harris.
La mayoría de esos mismos votantes dijeron que la mayoría de las noticias que escucharon sobre Trump fueron negativas, lo que arroja un puntaje de menos 22 puntos.
A medida que las campañas entran en su etapa final después del fin de semana festivo del Día del Trabajo, el desafío de Harris será descubrir cómo mantener esa ventaja frente a los duros ataques de Trump y sus aliados.
La decisión del independiente Robert F. Kennedy Jr. de suspender su campaña y dar su apoyo a Trump no tuvo un efecto evidente en la contienda. Kennedy recibió el apoyo del 5 por ciento de los encuestados en la encuesta de Bloomberg del mes pasado, una reducción respecto del máximo del 10 por ciento del pasado noviembre. El número de votantes de los estados clave que dijeron que estaban indecisos o que no votarían aumentó este mes, lo que sugiere que muchos votantes de Kennedy podrían ahora quedarse en casa.
Los demócratas también parecen tener ventaja en la parte inferior de la lista. Alrededor del 30 por ciento de los votantes de los estados clave dicen que la elección del gobernador de Minnesota, Tim Walz, por parte de Harris los hizo más proclives a votar por ella, mientras que solo el 23 por ciento dijo lo mismo el mes pasado sobre el senador de Ohio JD Vance después de que Trump lo eligiera como su compañero de fórmula.
Los votantes de los estados indecisos tenían más probabilidades de ver a Walz como una persona mentalmente apta, compasiva, honesta y experimentada que a Vance, a quien a menudo se considera peligroso.
Y la encuesta encontró que al menos una línea de ataque de Walz estaba funcionando: los votantes de los estados clave calificaron a Trump y a Vance como “raros” con más frecuencia que sus contrapartes en la lista demócrata.
