La pérdida de memoria es una de las mayores preocupaciones para el paciente, los familiares y el médico, ya que es el primer síntoma de la enfermedad de Alzheimer.
Sin embargo, aquellos pacientes que son conscientes de su pérdida de memoria, generalmente no implica que se trata de un enfermedad de demencia o de degeneración cognitiva.
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Según los expertos, la memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo se almacenan en diferentes partes del cerebro. El hipocampo ayuda a clasificar la información nueva y a asociarla con información similar que ya está guardada en el cerebro. Gracias a esto, se convierten los recuerdos a corto plazo en memoria a largo plazo.
El estudio científico "El papel de la memoria de trabajo en la resolución de problemas matemáticos. Tendencias en ciencias cognitivas" publicado en 2009 analiza la relación entre varios tipos de ejercicios matemáticos y el fortalecimiento de la memoria.
Este estudio profundiza en el rol de la memoria de trabajo en el aprendizaje de las matemáticas. También demuestra la influencia directa de la memoria de trabajo en las habilidades matemáticas.
Los expertos señalan que existen varios ejercicios matemáticos que pueden mejorar la memoria. Entre ellos se encuentran:
Cálculos mentales: sumas, restas, multiplicaciones y divisiones sin usar calculadora
Series numéricas: identificar patrones en secuencias de números y continuarlas
Operaciones combinadas: resolver problemas que incluyen varias operaciones matemáticas
Estos ejercicios físicos y mentales pueden ser un gran aliado para fortalecer la capacidad de recordación del cerebro
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Por otro lado, un grupo de investigadores del CONICET comprobaron que realizar 25 minutos de ejercicio en bicicleta ayudan a mejora la memoria espacial.
Para poder medirlo, realizaron un nuevo test de memoria dentro de un entorno de realidad virtual. El estudio evaluó a 98 voluntarios y voluntarias (de entre 18 y 35 años de edad) y observaron que el ejercicio físico mejora esa función cognitiva.