El español Carlos Alcaraz y el italiano Jannik Sinner empezaron el martes con sobresaltos sus recorridos en el Abierto de Estados Unidos, donde se vivió el partido más largo de la historia de este Grand Slam, que se prolongó por cinco horas y 35 minutos de juego.
El británico Daniel Evans, número 184 de la ATP, fue quien prevaleció frente al ruso Karen Khachanov (22º) por 6-7 (6/8), 7-6 (7/2), 7-6 (7/4), 4-6 y 6-4, superando el anterior récord del torneo que fijaron Stefan Edberg y Michael Chang con cinco horas y 26 minutos en las semifinales de 1992.
La segunda jornada en Nueva York deparó el debut de Alcaraz y Sinner, los jugadores que se han repartido triunfos en los tres anteriores torneos grandes del año.
Dejándose un set en el camino, Alcaraz solventó un enrevesado duelo frente al australiano Li Tu, número 186 de la ATP, por 6-2, 4-6, 6-3 y 6-1 en la pista central de Flushing Meadows.
El español, campeón del evento en 2022, dejó sensaciones encontradas ya que se mostró recuperado de la torcedura de tobillo sufrida el fin de semana pero aún exhibió lagunas mentales después de sus dolorosas derrotas de las últimas semanas, especialmente en la final de los Juegos Olímpicos de París frente a Novak Djokovic.
El osado Li Tu, proveniente de la qualy, fue capaz de mantenerle el nivel de velocidad y potencia durante largos tramos del partido, aprovechando un cortocircuito de Alcaraz en el servicio que le costó el segundo set.
"Obviamente (Tu) me sorprendió un poco", reconoció Alcaraz, que supo reconectarse a tiempo en el tercer set
La joya de El Palmar, de 21 años, encadena 15 partidos seguidos ganados en torneos grandes y persigue ser el tercer jugador de la era moderna en encadenar títulos de Roland Garros, Wimbledon y el US Open en el mismo año, después de Rod Laver (1969) y Rafael Nadal (2010).
Su rival en la segunda ronda será el neerlandés Botic van De Zandschulp, número 74 del ránking de la ATP.
Con Djokovic clasificado desde el lunes, Jannik Sinner completó el desembarco de los tres favoritos en la segunda ronda.
El italiano también cedió un set en un flojo inicio ante el estadounidense Mackenzie McDonald (140º) pero acabó recomponiéndose por marcador de 2-6, 6-2, 6-1 y 6-2.
Fue el primer juego de Sinner desde que una semana atrás estalló el escándalo por su absolución de dos positivos en controles antidopaje por la sustancia prohibida clostebol.
Estos resultados se registraron el pasado marzo y se mantuvieron en secreto mientras se permitió que Sinner siguiera compitiendo.
La semana pasada, la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) informó del caso y de la absolución del número uno mundial, lo que levantó críticas de algunos jugadores como el canadiense Denis Shapovalov, que dijo que era una muestra de que existen "diferentes normas para diferentes jugadores".
En su defensa, Sinner alegó que las pequeñas cantidades de clostebol detectadas en su cuerpo procedían de un aerosol que empleó su fisioterapeuta para tratarse un corte en un dedo y que acabó contaminando al tenista al aplicarle masajes.
"Realmente no puedo controlar lo que (los jugadores) piensan y lo que hablan. No puedo controlar la reacción de los jugadores", reconoció Sinner antes de agradecer el apoyo del público, que lo recibió con aplausos en la pista central.
Otro de los aspirantes, el ruso Daniil Medvedev, campeón en 2021 y finalista en 2023, también se dejó una manga en su victoria ante el serbio Dusan Lajovic por 6-3, 3-6, 6-3 y 6-1.
En el capítulo de decepciones destacó la del griego Stefanos Tsitsipas, que alargó su maldición en Flushing Meadows al ser eliminado por el australiano Thanasi Kokkinakis (86º de ATP) por 7-6 (7/5), 4-6, 6-3 y 7-5.
La delegación latinoamericana perdió a los chilenos Alejandro Tabilo y Nicolás Jarry, dos de sus tres mejor posicionados en el ranking.
En la rama femenina, la número uno mundial, la polaca Iga Swiatek, superó a la rusa Kamilla Rakhimova por 6-4 y 7-6 (8/6) en un juego en que tuvo que salvar tres pelotas de set.
Otra de las figuras más esperadas era la japonesa Naomi Osaka, quien deslumbró en su victoria ante la letona Jelena Ostapenko (10º de la WTA) por 6-3 y 6-2.
Doble campeona del torneo, Osaka se emocionó hasta las lágrimas en su regreso a Nueva York tras un año ausente por maternidad.
"El año pasado estaba viendo jugar a Coco (Gauff) y tenía tantas ganas de volver a pisar estas pistas", declaró Osaka entre lágrimas.
"No sabía si podría", reconoció. "Ganar este partido y estar en este ambiente significa mucho para mí".
Otra de las grandes victorias del día la protagonizó la mexicana Renata Zarazúa, número 92 de la WTA, que eliminó por 6-1 y 6-4 a la francesa Caroline Garcia, ganadora de las WTA Finals de 2022.
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