Una mujer vivió momentos de angustia tras experimentar lo que parecía ser un intento de secuestro y robo al abordar un taxi a través de una aplicación móvil. Ella fue identificada como Allison Mayuri, quien al notar que algo andaba mal, no dudó en abandonar la unidad saltando por la ventana.
El hecho ocurrió el viernes 23 de agosto. Allison relató que desde que abordó el taxi de la aplicación DiDi, para ir desde Carmen de la Legua, en el Callao, hasta Javier Prado, el conductor no dejaba de mirarla fijamente a través del espejo.
La situación se volvió aún más alarmante cuando, durante el trayecto por la avenida Colonial, el conductor sacó un cuchillo y lo guardó en la guantera, lo que la puso en alerta máxima. Incluso, compartió su ubicación en tiempo real a un familiar suyo.
Allison notó que el conductor desvió la ruta y cerró las ventanas y pestillos de las puertas a la altura de la avenida Alfonso Ugarte. Ella gritó pidiendo auxilio, pero el chofer no se detuvo. Eso la llevó a tomar una decisión rápida. Sin dudarlo, abrió la ventana de su asiento y se lanzó por ella para escapar y evitar ser secuestrada.
Posteriormente, las autoridades policiales lograron detener al conductor del taxi ese mismo día. Él fue identificado como Huber Mori Alejo. Sin embargo, a pesar de la denuncia y las pruebas presentadas, el fiscal a cargo del caso decidió liberar al individuo y solo dictó una medida de comparecencia.
La denunciante indicó que al momento de saltar de la ventana, dejó adentro su mochila en donde llevaba su billetera y tarjetas. Horas después, notó que el taxista había vaciado la cuenta de una de ellas.
"Él hizo consumos de hasta más de 100 soles. Los movimientos se registran por el jirón Recuay, en el centro de Lima. De todos modos hice mi reclamo por consumos no reconocidos".
Además, Allison dijo que tiene temor de que el taxista circule por su casa. "Él sabe donde vivo y todos los datos. Desde ahora ya no tomaré nunca un taxi aplicativo por el trauma que generó ese suceso", añadió.
En este mes se han registrado varios casos de secuestro. Uno de ellos se registró el pasado 8 de agosto, en la avenida Faucett, cuando Juan Carlos Álvarez fue bajado del tráiler que manejaba y conducido, por un grupo de personas, a otro vehículo de color plomo. Sin embargo, luego de seis horas de incertidumbre, Juan fue liberado.
Por otra parte, la Policía Nacional del Perú llevó a cabo un operativo y rescató a Erikson Reyes Zamora (33), un empresario dedicado al transporte público en El Agustino. Después de cuatro días en cautiverio, fue liberado por la banda criminal conocida como "Los Secos de Huandoy", que había exigido S/100.000 a su familia por su liberación.
"Luego de que el agraviado permaneció ahí por alrededor de 4 días, y es en ese ínterin, los familiares realizaron varios depósitos a diferentes cuentas bancarias haciendo un monto de s/16.900. El monto inicial que pedían por la liberación accedía a los s/ 100.000", detalló el coronel PNP, Jorge Luis Carpio Ordaya.
