"Debemos prepararnos para tiempos bastante duros, incluso muy duros, para Occidente", afirmó el martes el jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas francesas ante líderes empresariales.
"Estamos entrando decididamente en una nueva era, con un Occidente cuestionado (...) y una fragmentación extremadamente fuerte del orden internacional", advirtió el general Thierry Burkhard.
Ese orden internacional "fue fundado en base al derecho, construido por el mundo occidental y se nos acusa de haberlo construido para el mundo occidental", añadió, describiendo "al mismo tiempo el surgimiento de un orden alternativo (...), que quiere empujarnos afuera".
El oficial hizo esas declaraciones en el lanzamiento de una asociación (ProMilès) entre grandes empresas francesas y el ejército, dedicada a la reconversión laboral de soldados heridos, al refuerzo de la reserva y al empleo de cónyuges de militares.
En el mundo actual, "el uso de la fuerza se desinhibió y parece ser la forma más fuerte de imponer la voluntad y de resolver discrepancias", apuntó el general Burkhard.
"No creamos que el mundo de antes volverá. Tendremos que vivir con lo que está surgiendo", señaló.
Entre los sectores estratégicos esenciales para los próximos años, citó la guerra de la información, en la que los competidores de las potencias occidentales "actúan de manera extremadamente fuerte".
También mencionó el cambio climático como un "catalizador de caos, en términos de guerra, por el acceso a los recursos naturales, de desplazamientos de población o de hambrunas".