El sindicato UGT en Andalucía ha exigido este martes «más presencia» de vigilantes en los centros de salud ante las agresiones a sanitarios «recurrentes», la última de ellas en el ambulatorio de San Juan de Aznalfarache (Sevilla), donde un paciente amenazó a tres profesionales con «reventarles la cabeza » al mostrar su desacuerdo con el tratamiento prescrito para un dolor de muelas. Los daños físicos y psíquicos, las bajas laborales que provocan y los problemas asistenciales para el resto de profesionales y pacientes hacen «más que rentable y necesario» instaurar la presencia física de vigilancia en los centros de salud, ha defendido la central sindical en una nota de prensa. Las agresiones están creciendo «de manera continua». «Es un dato real ( más de un 7% en el primer semestre de este año en comparación con 2023) e influye muy negativamente en la salud de los profesionales también». Por ello, desde UGT, «exigimos medidas más contundentes contra esta plaga de agresiones que no sólo son de carácter físico, sino que la mayoría son no físicas y producen casi los mismos daños que las otras». Según UGT, los profesionales tienen «miedo de ser agredidos» y viven «atemorizados». «Esto produce no sólo problemas personales. El sistema se ve resentido por el coste en recursos humanos y materiales e igualmente la calidad asistencial también se puede ver alterada por estos episodios diarios. Aunque nadie está a salvo de sufrir alguna agresión, hay zonas y centros donde se da con más frecuencia y donde es inaceptable que no exista una vigilancia física por parte de personal especializado», ha apuntado el sindicato.