Si eres de los que no sabe cómo administrar su dinero, mala suerte: eres víctima del síndrome del desorden financiero, un concepto que agrupa a aquellas personas que no saben controlar sus gastos ni planificarlos a largo plazo, lo que puede poner en riesgo la salud de su economía.
El descontrol financiero empieza por la falta de una educación económica sólida, materia ausente en muchos estudios, y sigue por los hábitos de gasto poco saludables –tabaco, lotería, etc.–, pasando por deudas excesivas, como la contratación de préstamos a los que no vamos a poder hacer frente. En estas situaciones, también influyen la mala planificación financiera o la asunción de riesgos financieros innecesarios.
Para acabar con este caos, CaixaBank presenta cinco consejos para poner a punto nuestra economía. Antes de nada, es conveniente hacer un balance objetivo de nuestra situación financiera con los ingresos y gastos que hemos tenido en los últimos meses, además de incluir los créditos pendientes de pago. De este modo, podremos tener una visión completa de la situación en la que nos encontramos: salario, ingresos extraordinarios, gastos fijos y variables, inesperados, etc., lo que nos permitirá tomar decisiones a futuro más fácilmente.
Una vez tengamos el balance, lo siguiente es planificar el año financiero analizando cómo será el mes a mes. En este paso es importante reflejar los ingresos esperados y los gastos previstos, tanto los fijos –el pago de la hipoteca– como los extraordinarios –pago de una tasa municipal–. También es recomendable dejar una pequeña partida de dinero para gastos inesperados, como la reparación de un electrodoméstico o una sesión de dentista. Además de brindarnos tranquilidad, ese pequeño colchón nos permitirá pasar a un modelo financiero más sano, aunque hay que estar pendientes para comprobar si se ha cumplido el objetivo de ahorro y, en caso de no hacerlo, entender por qué.
Los gastos hormiga y las compras innecesarias merman nuestra capacidad de ahorro y suponen un agujero financiero que crece más y más rápido. Para evitarlos, es conveniente hacer una lista mensual con los productos y servicios que nos resulten estrictamente necesarios, de modo que todo lo que quede fuera de la lista necesitará un periodo de reflexión antes de adquirirlo. El secreto para triunfar está en comprar con responsabilidad.
Como ya se ha mencionado, la falta de conocimiento económico puede reducir nuestra capacidad de ahorro. Por este motivo, la entidad financiera recomienda formarse en economía doméstica con libros, trucos y técnicas que nos ayuden a consolidar nuestros conocimientos financieros. Si esta información no surtiera efecto, es aconsejable acudir a un experto en asesoramiento financiero para alcanzar nuestros objetivos de ahorro. El banco explica que con su ayuda, "seguro" que podremos crear hábitos que contribuyan a que nuestras finanzas tengan una "salud excelente".
